La secretaria del Tesoro de los Estados Unidos, Janet Yellen, llamó a los congresistas a llegar a un acuerdo "lo antes posible", para incrementar o suspender el límite de deuda antes del 15 de diciembre. De lo contrario, el país del norte podría caer en default por primera vez en la historia.
"Si bien tengo un alto grado de confianza de que el Tesoro pueda seguir financiando al Gobierno de los Estados Unidos luego del 15 de diciembre, existen escenarios donde no tendría los suficientes recursos para continuar financiando las operaciones del Gobierno luego de esa fecha", expresó Yellen en una carta enviada a la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi. Y sumó: "Para garantizar la completa buena fe y el crédito de Estados Unidos, es fundamental que el Congreso aumente o suspenda el límite de deuda lo antes posible".
De caer en cesación de pagos en sus obligaciones financieras, Yellen advirtió que el Gobierno estadounidense no podrá pagar a los empleados y contratistas federales ni tampoco los cheques de seguridad social; y, asimismo, los tenedores de bonos del Tesoro no recibirán los pagos de intereses. Yellen, el presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell y economistas advirtieron que un default, podría llevar a los Estados Unidos a una recesión y a un encarecimiento del crédito por un tiempo prolongado.
Según consignó la agencia Bloomberg, la fecha límite está vinculada con el nuevo plan de infraestructura de U$S 550.000 millones ratificado por el presidente Joe Biden el último lunes. Dicho paquete de medidas requerirá una transferencia del Tesoro de U$S 118.000 millones al Fondo Fiduciario de Carreteras a un mes de la promulgación de la ley, es decir el 15 de diciembre.
En octubre pasado, luego de un acuerdo en el Senado, se prolongó el límite de deuda en U$S 480.000 millones, lo cual permitió escapar temporalmente al país del default. El Tesoro actualmente se ubica a sólo U$S 25 millones del límite de deuda de U$s 28,9 mil millones y, hasta ahora, no hubo avances en el Congreso para suspender o aumentar el límite de deuda luego de la fecha estimada de diciembre.
El Partido Republicano ya anticipó que no apoyará un nuevo aumento del techo de deuda, e instó a los demócratas a aprobarla por su cuenta, utilizando el denominado "proceso de conciliación": Este mecanismo permite en el caso de leyes que afectan los ingresos o gastos federales, aprobar con mayoría sin el necesario umbral de 60 votos en el Senado. Los demócratas actualmente poseen 50 escaños de los 100 en el Senado, con el voto de desempate de la vicepresidenta Kamala Harris en su calidad de presidente de la Cámara alta; por lo que podrían utilizar el atajo.
Sin embargo, el líder de la bancada demócrata en el Senado, Chuck Schumer, explicó que la deuda requiere una aprobación bipartidista, tal como lo fue durante la gestión del expresidente Donald Trump.