Elon Musk se burla de Justin Trudeau en su red social: “Niña, ya no gobernás”

Con lenguaje misógino, el empresario multimillonario se sumó a la pelea para hacerse del territorio canadiense que emprendió el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump.

08 de enero, 2025 | 18.41

Los pronunciamientos del hombre más rico del mundo parecieran no tener límites. Elon Musk ya generó varias polémicas: apoyó al partido filonazi Alternativa por Alemania (AfD) en medio de un proceso de elecciones y fue acusado por Alemania, Francia y el Reino Unidointerferir” en los procesos de otros países. Ahora, fiel al ideario conservador y ultraderechista, reaccionó a una publicación del todavía primer ministro canadiense, Justin Trudeau, que rechazó la idea de que el país se fusione con Estados Unidos.

“No existe la más mínima posibilidad de que Canadá se convierta en parte de los Estados Unidos. Los trabajadores y las comunidades de ambos países se benefician de ser el mayor socio comercial y de seguridad del otro”, dijo sintético el saliente jefe de Estado. Parece ser que Musk se sintió tentado de responder con un tono fuertemente misógino y omnipotente: “Niña, ya no sos el gobernador de Canadá, así que no importa lo que digas”, escribió en una publicación en su propia red social X, ex Twitter, luego que Trump propusiera anexar ese país vecino y convertirlo en una provincia de Estados Unidos. 

La disputa es en alusión a la idea del presidente electo, Donald Trump, de que Canadá se “fusione” con Estados Unidos: “Muchas personas en Canadá amarían ser el estado número 51”, manifestó, luego de que Trudeau anunciara su dimisión al cargo y al liderazgo del Partido Liberal, en medio de una crisis interna que se profundizó en los últimos meses por la renuncia de su ministra de Finanzas.

Las polémicas intervenciones de Musk

En los últimos días, fueron varias las intervenciones que llevó a cabo tanto desde su red social como a través de publicaciones que hizo en medios de distintos países, que le valieron el repudio de las dirigencias de países como el Reino Unido, Alemania y Francia. En el caso de Alemania, publicó una opinión en el portal Welt am Sonntag -un medio hermano de Político propiedad del Grupo Axel Springer- en apoyo a AfD, partido político que consideró que sólo esa organización “puede salvar” a la máxima economía europea.

"No recuerdo un caso comparable de injerencia en la campaña electoral de un país amigo en la historia de las democracias occidentales", sostuvo el favorito a la Cancillería el conservador Fredrich Merz. En defensa del magnate estadounidense, salió el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, que dijo que Musk habló como "ciudadano". "En nuestro país, los ciudadanos particulares pueden decir lo que quieran", afirmó Blinken en París.

"Él, como cualquier estadounidense, tiene derecho a expresar sus opiniones", declaró, a pesar de que ya se sabe que el multimillonario fue una pieza clave en la campaña de Trump, así como lo será en la segunda gestión del republicano, ya que será designado al frente del Departamento de Eficiencia del Estado. 

El jefe de la diplomacia francesa, Jean-Noël Barrot, exhortó en Bruselas el miércoles a proteger los Estados miembros de la Unión Europea contra las injerencias en el debate público europeo: "O la Comisión Europea aplica con el mayor rigor las leyes que nos hemos dado para proteger nuestro espacio público, o no lo hace y entonces será necesario que acepte que sean los Estados miembros de la UE los que puedan hacerlo", dijo.

Por su parte, el presidente de España, Pedro Sánchez, lo acusó de atacar las instituciones y atizar el odio. A él se sumó su par francés, Emmanuel Macron, que lamentó que el hombre más rico del planeta apoyara "una internacional reaccionaria" en Europa.