Elon Musk volvió a desafiar a la justicia brasileña después de que esta prohibiera el uso de la red social X en el país por falta de representación legal en ese territorio e incumplimiento de órdenes judiciales. Con una jugada técnica, el dueño de Space X y Tesla reactivó la plataforma al cambiar de servidores donde se aloja la red social. Ahora las autoridades de Brasil tendrían más dificultades para volver a restringir la plataforma. Juez de la Corte Suprema dijo que Musk volvió a “faltarle el respeto al Poder Judicial” y dispuso una nueva multa contra el magnate.
El Supremo Tribunal Federal (STF), la Corte Suprema de Brasil, había ratificado a principio de mes la suspensión de los servicios de la red social X (ex Twitter) en el país, por los reiterados desacatos del multimillonario sudafricano-estadounidense a varias sentencias del tribunal. En tanto, Musk, quien ya había adelantado que no respetaría la sentencia, cumplió con su promesa. Mientras el miércoles circulaba el hashtag #TwitterVoltou (Twitter ha vuelto), comenzó a correr la pregunta de cómo había logrado Musk colocarse por encima de todo control y toda ley para reactivar la plataforma. La red social afirmó que volvió a estar accesible en Brasil de forma "involuntaria", pero enseguida se supo la maniobra.
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Dicho simple, lo que hizo Musk fue cambiar el servidor en el que estaba alojado X -y donde estaba bloqueado- a otro llamado Cloudflare, que tiene algunas especificidades que hacen más dificil su bloqueo. En términos técnicos, la Asociación Brasileña de Proveedores de Internet y Telecomunicaciones (Abrint) explicó que hasta el momento X usaba direcciones de IPs específicas que podían ser bloqueadas más fácilmente. Sin embargo, actualizó la aplicación al servidor de Cloudflare, que utiliza direcciones IP que cambian constantemente y son más complicadas de restringir. Esa modificación “volvió el bloqueo mucho más difícil”, dijo en un comunicado divulgado en su página web. Muchas de las IP dinámicas se comparten con otros servicios como bancos y grandes plataformas de Internet, lo que hace imposible bloquear una IP sin afectar a otros servicios.
Por su parte, la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) explicó al diario O Globo que una actualización de la aplicación abrió esta “ventana” para que algunos usuarios accedieran a la plataforma. El equipo técnico de la agencia se dio cuenta de que el contenido X se había colocado en redes de servidores, llamadas CDN (Content Delivery Networks) y como consecuencia, las direcciones únicas que identifican a los dispositivos en Internet (llamadas IP) no estaban bloqueadas en estas nuevas redes. Como resultado, los usuarios que fueron dirigidos a estos nuevos servidores han visto restablecido su acceso.
En un comunicado publicado por la cuenta corporativa de X aclararon que hicieron un cambio de proveedor para dar mejor servicio a sus usuarios latinoamericanos. Como resultado, volvió accesible para los usuarios que son clientes de proveedores de internet pequeños, mientras que cuentan con operadores más grandes como Vivo o Claro siguen bloqueando el acceso.
En tanto, Musk no apareció en redes. Y si durante semanas eligió confrontar con los miembros de la Corte Suprema brasileña, especialmente con el juez Alexandre de Moraes, contra quienes realizó posteos agresivos durante semanas e incluso llamó a que la población se movilice para desplazarlos, ahora eligió la cautela. No aludió directamente al tema y por las horas en que se reporteaba el regreso de la plataforma a Brasil, reversionó en X la frase del escritor Arthur C. Clarke que señala que "cualquier tecnología suficientemente avanzada es indistinguible de la magia" y que Musk reversionó diciendo: “Cualquier magia suficientemente avanzada es indistinguible de la tecnología”.
Quienes sí celebraron la decisión de Musk, fueron opositores al Gobierno de Lula que implican al presidente en esta decisión del tribunal -sin tener en cuenta que son poderes separados- y hablan de una suerte de complot del “sistema” en contra de la oposición en Brasil, ya que toda la rivalidad entre la justicia y Musk comenzó con las investigaciones en contra las milicias digitales que agitaron los sectores que apoyaron al exmandatario Jair Bolsonaro para no reconocer el resultado de la última elección presidencial de 2022 y hasta llegaron a alentar la toma de los edificios de los tres poderes en Brasilia el 8 de enero de 2023. El cuestionado exfiscal Delta Dallagnol -quien impulsó las denuncias contra Lula, que derivaron en su detención pero que luego se mostraron improcedentes- describió la decisión de X como una “jugada maestra”, desestimando que pasó por encima decisiones judiciales.
Algunas voces globales, alertaron en los últimos días sobre las consecuencias de la falta de soberanía digital y los alcances de la disputa de Musk con Brasil. Como comentó Nora Bär en El Destape, esta semana se publicó la carta titulada “Contra el ataque de las grandes empresas tecnológicas a la soberanía digital”, por parte de un grupo internacional que reúne a las celebridades del momento en materia de políticas y economía de la ciencia y la digitalización y en la que se expresa preocupación por los continuos ataques de las Big Tech y sus aliados a la soberanía digital de Brasil.
Reacción de la justicia
El juez de Moraes, dijo hoy que X actuó para eludir la decisión que suspendió su funcionamiento en Brasil, en una acción que definió como “dolosa, ilícita y persistente”. También dijo que la decisión de la plataforma “fue directamente confesada por su mayor accionista, Elon Musk, en una publicación en la propia X dirigida a todo el territorio nacional”, escribió el ministro en la decisión, pero no aclaró a qué se refería exactamente. Moraes también dijo que no hay “ninguna duda de que la plataforma X -bajo el mando directo de Elon Musk- una vez más tiene la intención de faltar el respeto al Poder Judicial brasileño, ya que Anatel identificó la estrategia utilizada para desobedecer la orden judicial emitida en el expediente del caso”.
En consecuencia, el magistrado multó a la Plataforma X y a Starlink (empresa satelital de Musk que sigue operando en Brasil) con 5 millones de reales diarios por no cumplir con el bloqueo que ordenó a finales de agosto y ratificó en septiembre, según informaron medios brasileños como UOL y O Globo.