El Congreso de Estados Unidos avanza en la prohibición total de TikTok, un paso más en la guerra tecnológica y comercial con China. La iniciativa, aprobada por la Cámara baja por 352 votos a favor y 65 en contra, propone eliminarla de las tiendas de todo el país o, en su defecto, da un plazo de 165 días para que se escinda de su empresa matriz china ByteDance. La red social es una de las más populares del mundo con más de 1,218 millones de usuarios, de los cuales 116,5 millones son estadounidenses.
Aunque aún el destino de la normativa no está definido en el Senado, desde la CNN señalaron que el apoyo mayoritario fue tanto por parte de demócratas como de republicanos. Mientras que de los 65 legisladores y legisladoras que se manifestaron en contra 50 son demócratas y sólo 15 republicanos.
La idea que se esconde detrás de la iniciativa es que Pekín pueda utilizar la aplicación como caballo de Troya para acceder a datos de las personas, para usarlos en favor de China. Esta, de hecho, no es la primera medida en contra que se toma desde Occidente, por ejemplo, Washington, Bruselas y Ottawa hace un año vetaron su uso en los móviles corporativos de las y los funcionarios lo que fue considerado por el gigante asiático como una medida de “represión” que apunta a “contener y frenar” el desarrollo de la segunda economía mundial.
Más allá del apoyo bipartidario para esta iniciativa, lo cierto es que las corrientes de pensamiento son disímiles. Uno de los casos emblemáticos es el expresidente republicano Donald Trump, que alguna vez fue partidario de prohibir la plataforma, se mostró ambiguo sobre su posición y en una de sus últimas publicaciones al respecto en la red social Truth Social expresó se manifestó en contra de la prohibición. Su argumento fue que si TikTok estuviera fuera de escena, Facebook sería beneficiado, dijo, al tiempo que catalogó al director ejecutivo de Facebook y Meta, Mark Zuckerberg, como “enemigo del pueblo”.
Por su parte, el representante republicano de Wisconsin Mike Gallagher, que preside un comité de la Cámara de Representantes sobre China, rechazó las caracterizaciones del proyecto de ley como una prohibición de TikTok. "No es una prohibición", dijo en declaraciones a la prensa y explicó que, en realidad, "pone directamente en manos de TikTok la decisión de romper su relación con el Partido Comunista Chino. Mientras ByteDance ya no sea propietario de la empresa, TikTok podrá seguir… la estructura básica de propiedad tiene que cambiar".
"Hoy voté no a un proyecto de ley profundamente defectuoso que fue presentado apresuradamente y amenaza con prohibir TikTok. Esto no es una gobernanza responsable. En lugar de apuntar a una sola empresa, el Congreso debería promulgar una legislación integral sobre privacidad de datos", escribió en sus redes sociales la demócrata Cori Bush.
La opinión de TikTok
"Esta legislación tiene un resultado predeterminado: una prohibición total de TikTok en Estados Unidos", escribió la compañía en una publicación en X. "El gobierno está intentando despojar a 170 millones de estadounidenses de su derecho constitucional a la libre expresión. Esto dañará a millones de empresas, negará audiencia a los artistas y destruirá los medios de vida de innumerables creadores en todo el país".
El CEO de TikTok, Shou Chew, en tanto, buscó concretar reuniones de última hora con miembros del Congreso y la empresa envió cartas a varios legisladores el lunes acusándolos de caracterizar erróneamente la campaña de llamado a la acción de TikTok, diciendo que es "ofensivo" que los legisladores desestimen las opiniones de los electores que “abrumaron” las oficinas del Congreso con llamadas telefónicas.