Los ensayos clínicos para la vacuna contra el coronavirus del laboratorio AstraZeneca Oxford se reanudaron en el Reino Unido tras la confirmación por parte de la Autoridad Reguladora de la Salud de Medicamentos (MHRA) de que era seguro hacerlo.
El 6 de septiembre, el proceso de revisión estándar provocó una pausa voluntaria en la vacunación en todos los ensayos mundiales para permitir la revisión de los datos de seguridad por parte de comités independientes y reguladores internacionales. El comité del Reino Unido concluyó sus investigaciones y recomendó a la MHRA que es seguro reanudar los ensayos en el Reino Unido.
"AstraZeneca y la Universidad de Oxford, como patrocinadores del ensayo, no pueden revelar más información médica. Todos los investigadores y participantes del ensayo serán actualizados con la información relevante y esta se divulgará en los registros clínicos globales, de acuerdo con los estándares regulatorios y del ensayo clínico", revela el comunicado difundido en el sitio web del laboratorio.
Además, agrega que "la Compañía continuará trabajando con las autoridades de salud de todo el mundo y será guiada sobre cuándo se pueden reanudar otros ensayos clínicos para proporcionar la vacuna de manera amplia, equitativa y sin fines de lucro durante esta pandemia".
La interrupción quedó atrás
El laboratorio había puesto en pausa las pruebas de su vacuna contra el COVID-19 por sospechas de que causó reacciones adversas graves en un participante del estudio. Según el reporte que se dio a conocer, se trató de un paréntesis por “exceso de precaución”.
No se conocen todavía detalles de cuál fue el problema que causó la interrupción. Las fuentes citadas por StatNews especifican que se trata de “una acción de rutina que debe suceder cada vez que aparece una enfermedad potencialmente inexplicada en alguna de las pruebas, mientras se la investiga, para asegurar la integridad de las pruebas”.