Brasil critica a los líderes que van en avión privado a la COP27, a la que volvió a faltar Bolsonaro

15 de noviembre, 2022 | 16.44

El ministro de Medio Ambiente de Brasil, Joaquim Leite, recriminó hoy a los "líderes y empresarios" que acudieron en aviones privados a Egipto para asistir a la cumbre del clima de Naciones Unidas COP27, en la que por segunda vez rechazó participar el presidente Jair Bolsonaro.

"Filántropos, líderes y empresarios y su siempre exagerada cantidad de asesores llegaron en jets privados al lujoso balneario del mar Rojo para exigir a otros objetivos de reducción de emisiones", criticó Leite, después de que se supiera que el presidente electo, Luiz Inácio Lula da Silva, viajó en uno de estos aviones.

Leite desestimó las propuestas de quienes viajaron a la cita del clima en la ciudad de Sharm el Sheij por estar "completamente desconectados de la realidad de las diferentes regiones de Brasil y del mundo", en referencia al uso de "coches modernos de hidrógeno o cien por cien eléctricos", consignó la agencia Europa Press.

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"Los gobiernos tienen la responsabilidad de actuar en esta agenda con racionalidad, sin discursos populistas y utópicos", subrayó el funcionario durante su intervención en el evento, al que por segunda vez Bolsonaro se rehusó a ir, por lo que fue reprendido debido a sus políticas medioambientales,

Si bien el año pasado decidió no asistir a la cita que se celebró en Glasgow, Escocia, después de ser repudiado por su gestión de los incendios en la Amazonia, tanto esta ocasión como la de la cumbre del G20 que se celebra en Bali, Indonesia, coincidió con su derrota en las elecciones, tras la cual se recluyó y desatendió su agenda.

Desde que perdió el balotaje el pasado 30 de octubre, rara vez salió del Palacio de la Alvorada, la residencia oficial del mandatario, y limitó sus intervenciones a escasas publicaciones en redes sociales.

Sus aliados y compañeros de partido han pasado de la comprensión inicial a cierto enfado por su ostracismo y le reprochan no estar haciendo lo suficiente para ser el líder que la oposición necesita, mientras sus seguidores siguen apostados en las calles pregonando reclamos golpistas y protestando por la victoria de Lula.

Con información de Télam

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