Entró en vigencia el alto el fuego que puso fin a cinco días de hostilidades entre el Ejército israelí y grupos palestinos en la Franja de Gaza que dejaron 35 muertos, casi todos ellos palestinos. La tregua fue negociada por Egipto, mediador tradicional entre Israel y los grupos armados palestinos.
En los 15 minutos siguientes al comienzo del alto el fuego se registraron dos lanzamientos de cohetes de Gaza hacia Israel que no dejaron víctimas, seguidos de nuevos bombardeos israelíes en el enclave palestino, informó la agencia de noticias AFP. El Cogat, el organismo del Ministerio de Defensa israelí que supervisa las actividades civiles en los territorios palestinos, anunció este domingo "la reapertura parcial y progresiva" de pasos fronterizos que permiten a los palestinos ir a Israel.
También se abrió el único punto de paso israelí para llevar mercancía hacia la Franja de Gaza. "La apertura completa" será posible tras nuevas valoraciones de la situación, añadió el Cogat en un comunicado.
Los enfrentamientos empezaron la semana pasada con ataques israelíes que mataron a seis comandantes de Yihad Islámica, un grupo islamista palestino que ha reivindicado decenas de ataques antiisraelíes tanto contra tropas de ocupación como contra civiles. También murieron combatientes de ese movimiento y del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), otro grupo armado.
Yihad Islámica respondió lanzando decenas de cohetes hacia ciudades del centro y sur de Israel. El brote de violencia fue el mayor entre Israel y grupos armados de Gaza desde agosto de 2022, y coincidió con uno de los periodos más violentos en años en Cisjordania, los otros territorios palestinos que Israel ocupa desde 1967.
Los bombardeos israelíes en Gaza mataron a 34 palestinos e hirieron a 190, dijo el Ministerio de Salud de la región. Entre los muertos había al menos 13 civiles, siete de ellos menores, según la ONU. Del lado israelí, una mujer mayor murió por un ataque con cohetes en Rehovot, en el centro de Israel, y 30 personas resultaron heridas.
La Franja de Gaza ha sufrido varias ofensivas de Israel desde que, en 2007, cayó en poder del movimiento islamista palestino Hamas, que es mucho más poderoso que Yihad Islámica y no participó de estas recientes hostilidades. En agosto de 2022, tres días de enfrentamientos entre Israel y Yihad Islámica causaron la muerte de 49 palestinos, incluidos al menos 19 niños, según la ONU.
Estados Unidos celebró el anuncio de tregua, así como la ONU, que lamentó "la pérdida de vidas humanas y los heridos" causados por los ataques de ambos lados. En el vaticano, el Papa Francisco pidió el domingo que "la tregua apenas alcanzada se vuelva estable". "Que callen las armas, porque con las armas no se obtendrá jamás la seguridad y la estabilidad. Al contrario, se continuará destruyendo toda esperanza de paz", reclamó el pontífice.
En Israel, el Gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu felicitó al Ejército y advirtió que responderá a cualquier ataque. "Hoy, los enemigos de Israel en Gaza y más allá saben que aunque intenten esconderse, podemos y vamos a alcanzarlos", declaró Netanyahu al comienzo de una reunión de gabinete.
La respuesta israelí a la iniciativa egipcia implica que "si Israel es atacada o amenazada, seguirá haciendo lo que tenga que hacer para defenderse", afirmó Tsachi Hanegbi, asesor de seguridad nacional de Netanyahu. El canciller israelí, Eli Cohen, agregó: "Felicito al ejército israelí, al servicio de seguridad interna Shin Bet y al conjunto de fuerzas de seguridad por las acciones realizadas para golpear a los terroristas de la Yihad Islámica y proteger a los residentes de Israel".
En Gaza, el vocero de Yihad Islámica, Tariq Salmi, advirtió a Israel contra "toda acción estúpida o asesinato de comandantes de la resistencia palestina". Mohammad Al Hindi, responsable de la rama política de Yihad Islámica, informó de un acuerdo en el que Israel se compromete a "dejar de atacar a combatientes".
Con información de Télam
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