Varias ONG denunciaron incendios, ataques con piedras y daños a campos de cultivos contra palestinos por parte de colonos israelíes. Según informaron medios locales, los ataques son en represalia por el atentado del pasado viernes cerca de una sinagoga en la ocupada Jerusalén este, que dejó a siete israelíes muertos, lo que llevó a que la Policía israelí elevara el nivel de alerta. Hace solo 4 días, la también ocupada Cisjordania vivió la jornada más letal en años: 10 palestinos murieron y alrededor de 20 resultaron heridos durante un operativo de las fuerzas de ocupación israelíes en un campo de refugiados.
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Y la escalada de violencia no está ni cerca de terminar. Una vivienda y un coche palestinos fueron incendiados por individuos enmascarados en la localidad de Turmus Ayya, a las afueras de la ciudad cisjordana de Ramallah. La Policía israelí sospecha que eran israelíes, según informó el diario israelí The Jerusalem Post. Medios palestinos, por otra parte, informaron de otros ataques y de incendios intencionados de vehículos a manos de colonos israelíes en otros puntos de Cisjordania y la ONG israelí Yesh Din denunció varias agresiones durante la noche del sábado, informó la agencia de noticias Europa Press.
También se notificó de, al menos, cuatro casos de colonos israelíes que lanzaron piedras contra palestinos, contra viviendas palestinas o contra coches palestinos. En la región del valle del Jordán -ubicada en el sur de la ocupada Cisjordania- hay noticias de graves daños a invernaderos y campos de cultivo palestinos.
También la ONG israelí Betselem informó sobre colonos israelíes que levantaron una edificación en terrenos palestinos y atacaron a los propietarios cuando llegaron al lugar. Los colonos después prendieron fuego a los vehículos de los palestinos, atacaron a una ambulancia y al equipo médico que llegó para atender a los palestinos heridos.
Oficialmente, las autoridades de la ocupación israelí informaron de un total de 160 casos de lanzamiento de piedras en Cisjordania, 85 de los cuales corresponden a ataques contra palestinos. En 40 de ellos se contabilizaron daños en coches, informó la televisión israelí N12.
En este contexto, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, pidió este sábado a los ciudadanos israelíes que "no tomen la justicia por mano propia" y prometió que el Gobierno responderá al ataque del viernes pasado. Esta mañana, cumplió: anunció que le quitarán la ciudadanía israelí a los familiares de los palestinos que cometan ataques y les negarán las prestaciones de la seguridad social. Esto se suma la cuestionada represalia que ya venían cumpliendo y permite la demolición de la residencia familiar de los palestinos que participan de atentados, lo que ya comenzó a organizarse para la familia del agresor del viernes.
Con información de Télam
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