De los 99 periodistas y trabajadores de prensa que murieron a lo largo de 2023, 72 fallecieron bajo las bombas israelíes en la Franja de Gaza desde el 7 de octubre, fecha en la que estalló la guerra entre el Estado hebreo y el movimiento islamista Hamas, según un informe publicado hoy por el Comité para la Protección de Periodistas (CPJ). Casi tres cuartas partes del total de los trabajadores de prensa muertos en todo un año se concentra en los últimos dos meses y medio de 2023.
Los periodistas, en su mayoría palestinos, murieron en la guerra que libra Israel en la Franja de Gaza desde los ataques perpetrados el 7 de octubre por Hamas en territorio israelí. "Los periodistas de Gaza están dando testimonio en primera línea", dijo la directora ejecutiva del CPJ, Jodie Ginsberg, en un comunicado, en el que advirtió de que la "inmensa pérdida sufrida por los periodistas palestinos en esta guerra tendrá repercusiones a largo plazo para el periodismo, no solo en los territorios palestinos, sino también en la región y fuera de ella", informó la agencia de noticias AFP. "Cada periodista muerto es un golpe más a nuestra comprensión del mundo", lamentó Ginsberg.
El conflicto palestino-israelí se cobró en casi tres meses la vida de más periodistas de los que murieron en un solo país en todo un año, alertó la organización con sede en Nueva York que vela por la libertad de la prensa. Asimismo, agregó que los trabajadores de prensa siguen muriendo: el 7 de febrero, a cuatro meses del estallido del conflicto, la CPJ anunció que el número de comunicadores muertos en Gaza se elevaba a 85. En algunos casos, hasta las familias de los periodistas fueron blanco de las fuerzas israelíes, denuncia la organización.
En paralelo, la CPJ investiga si una docena de periodistas muertos en Gaza fueron atacados deliberadamente por soldados israelíes, lo que constituiría "un crimen de guerra". La organización ya había denunciado en el pasado lo que parece una "persecución" de las fuerzas israelíes contra comunicadores. En un informe publicado en mayo de 2023, la organización acusó al Ejército israelí de haber asesinado en 22 años al menos a 20 periodistas, "sin que nadie haya rendido cuentas por sus muertes". Israel entró a formar parte por primera vez de la lista de países con mayor número de periodistas presos, con 17 casos al 1 de diciembre de 2023, anunció en diciembre la CPJ.
A nivel mundial, el número de comunicadores muertos en 2023 es el más alto desde 2015 y supone un aumento de casi 44% respecto de las cifras de 2022 (69 muertos). De los 99 casos admitidos en 2023, 78 periodistas fueron asesinados en el ejercicio de su profesión, lo que constituye un récord, mientras que aún se están investigando las circunstancias de la muerte de otros ocho y 13 son personal de apoyo de los medios. Si se excluyen las muertes en Israel, Gaza y Líbano, en 2023 se contabilizaron 22 periodistas caídos en el ejercicio de su profesión en 18 países, lo que "no significa que el periodismo sea más seguro", alerta la organización.
La mayor reducción la registraron Ucrania y México, que pasaron de 13 asesinatos anuales a 2 cada uno de ellos. Sin embargo, en el caso de México, la CPJ alertó que es, junto a Filipinas y Somalia, "uno de los países más mortíferos del mundo para los periodistas", donde en un contexto de corrupción y crimen organizado siguen siendo objeto de ataques, acoso, amenazas y secuestros. A ello suma el "espionaje" por parte de las agencias gubernamentales, que ha hecho que "un número significativo de periodistas hayan tenido que abandonar sus hogares y sus profesiones, debido a la violencia", denunció la organización.
Estos crímenes "indican claramente que debemos trabajar colectivamente para garantizar que los asesinos de periodistas sean llevados ante la justicia, que prevalezca una cultura de seguridad en las redacciones, y que el derecho del público a estar informado esté protegido de aquellos cuyo poder se ve amenazado por el escrutinio de la información", recomienda Ginsberg.