La situación pandémica de Brasil empeoró y el viernes pasado registró 1.582 muertos por coronavirus, el día más letal desde que inició la pandemia hace un año. Mientras tanto, el presidente Jair Bolsonaro continúa con su política de no hacer frente a la emergencia sanitaria y desaconseja el uso del tapabocas, aunque los estados del sur decretaron el cierre total de actividades ante el dramático agravamiento de la situación.
El país contabilizó hasta el momento 251.661 muertes y es el segundo en el mundo en defunciones producidas por el COVDI-19. A raíz de la mala gestión para atravesar la pandemia y la irresponsabilidad política de Bolsonaro, en este contexto falleció una joven de 13 años por coronavirus conmueve al país.
La niña se llama Ana Clara Macedo dos Santos y estudiaba en Campinas, San Pablo. Se contagió, según contó su familia, cuando concurrió a clase y murió el 24 de febrero por graves complicaciones. La noticia fue confirmada por el diario O Globo. Esa situación generó un fuerte debate en las redes sociales, del cual también participó una docente de la joven fallecida.
"Junto al sufrimiento por lo ocurrido, viene el odio por saber que puede ser el inicio de una tragedia ya anunciada y llevada adelante por el gobernador Doria y su secretario de Educación, Rossieli Soares, en medio de todo el negacionismo de Bolsonaro que cobra vidas", escribió la docente. La adolescente, según el informe, era alumna de la Escuela Estadual Escritora Rachel de Queiroz, en Jardim Yeda.
En Brasil, como en cualquier parte del mundo, los docentes no aceptan regresar a clases presenciales sin condiciones de seguridad efectivas, vacunación amplia y control de la pandemia. Denuncian que las escuelas no están del todo adaptadas para funcionar en las condiciones que requiere la epidemia del Covid-19. De acuerdo al sindicato, los locales escolares están mal ventilados, hay pocos baños en las escuelas y los educadores no recibieron suficiente equipo de protección personal.
El Departamento de Vigilancia Sanitaria (Devisa) de Campinas abrió una investigación sobre la muerte de la estudiante. El viernes 26, un día después del funeral de Ana Clara, el organismo informó que el examen de PCR para COVID-19 de la niña de 13 años fue negativo, pero que el Departamento sigue esperando otros exámenes complementarios para confirmar los dichos de la familia. La joven había evidenciado todos los síntomas compatibles con el coronavirus.