El Banco Central de Brasil elevó la tasa de interés un punto porcentual hasta 11,75%, informó la entidad en un comunicado. El ajuste, el noveno consecutivo en un año, dejó el parámetro en su mayor nivel en casi cinco años, desde abril de 2017.
"En su 245ª reunión, el Comité de Política Monetaria (Copom) decidió por unanimidad elevar la tasa de interés básica, la Selic, al 11,75 por ciento anual", sostuvo el texto. El comunicado explicó la suba argumentando que la situación internacional se deterioró a raíz del conflicto entre Rusia y Ucrania que "ha provocado un importante endurecimiento de las condiciones financieras y una mayor incertidumbre en torno al escenario económico mundial".
En particular, añadió que "la crisis de oferta derivada del conflicto tiene el potencial de exacerbar las presiones inflacionistas que ya se venían acumulando tanto en las economías emergentes como en las avanzadas". La autoridad monetaria del país vecino destacó que ya prevé otro ajuste de la misma magnitud en la próxima reunión, en medio de un ambiente de deterioro fiscal e inflación creciente.
Los futuros pasos dependerán de la evolución de la actividad económica, del balance de riesgos y de las proyecciones y expectativas de inflación para el horizonte relevante de la política monetaria, concluyó el comunicado. Cabe recordar que la inflación de Brasil en marzo acumula una subida de casi el 11% en los últimos 12 meses, según el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística.
En febrero, la inflación fue del 1,01%, 0,47 puntos por encima de lo registrado en enero (0,54%). Se trató de la mayor variación para un mes de febrero desde 2015, cuando el índice fue del 1,22%.
¿Qué puede pasar en Argentina?
En el marco de las negociaciones con el FMI, el ministro de Economía, Martín Guzmán, aseguró que uno de los objetivos de la política monetaria será fijar una tasa de interés positiva en términos reales. A mediados de febrero, el Banco Central subió de 39% a 41,5% la tasa de interés que pagan los plazos fijos a 30 días para las personas humanas, lo que representa un rendimiento de 50,4% de Tasa Efectiva Anual (TEA).
Para el resto de los depositantes del sistema financiero la tasa mínima garantizada se establece en 39,5%, lo que representa una TEA de 47,5%. La medida forma parte de una adecuación de la política monetaria del BCRA en línea con sus "Objetivos y Planes 2022", con la que busca establecer un sendero de tasa de interés que otorgue "retornos reales positivos sobre las inversiones en moneda local, y de preservar la estabilidad monetaria y cambiaria".
Con la última modificación, la tasa de la Leliq a 28 días -los títulos de deuda a los que pueden acceder los bancos para respaldar los plazos fijos de sus depositantes- tienen un rendimiento de 42,5% nominal anual (TNA), equivalente a una TEA de 51,9%, mientras que la Leliq a 180 días pasó a tener un rendimiento de 47% nominal anual (TNA), equivalente a una TEA de 52,6%.
Con la disparada inflacionaria, no se prevén cambios en el corto plazo. La suba abrupta de precios atenta contra las metas del Gobierno en el terreno monetario, un campo en el cual será dificultoso mantener el equilibrio, ya que un aumento de la tasa también impacta sobre el costo crediticio que deben afrontar las pequeñas y medianas empresas.