Diputado y ex policía indultado por Bolsonaro, ahora número dos de la comisión de Seguridad Pública

La corte suprema lo había condenado e inhabilitado para cargos públicos por amenazar a sus miembros, pero el mandatario lo ayudó en el mismo día. Ahora, será autoridad de esa comisión clave del Congreso, al igual de la de Constitución, Justicia y Ciudadania. 

27 de abril, 2022 | 18.40

El diputado de ultraderecha Daniel Silveira, el mismo al que el mandatario Jair Bolsonaro indultó cuando la corte suprema lo condenó a una pena de cárcel por amenazar a sus miembros, fue elegido este miércoles como el vice presidente de la Comisión de Seguridad Pública y Combate contra el Crimen Organizado de la cámara baja del Congreso de Brasil. Además, el ex policía devenido en legislador será parte de la Comisión de Constitución, Justicia y Ciudadania; suplente en la de Educación y titular de la de Deporte y Cultura. 

Las designaciones se concretaron pese a que el Supremo Tribunal Federal (STF), la máxima corte de Brasil, le había dado 10 días a Bolsonaro para justificar el indulto que le dio a su aliado, luego que ese misma corte lo había condenado a casi 9 años de prisión por incitar a la realización de acciones antidemocráticas y amenazar a jueces. "Requiéranse informaciones al Presidente de la República a ser prestadas en un plazo de hasta diez días y después que se dé vistas a la Abogacía General de la Unión y la Procuraduría General de la Unión", según una resolución de la jueza Rosa Weber, del STF.

Antes, Bolsonaro había defendido su decisión ante la prensa. "El decreto de la gracia es constitucional y será cumplido. En el pasado liberaban a delincuentes, nadie decía nada. Hoy yo suelto a inocentes", sentenció durante una visita a una feria de tecnología agrícola en San Pablo. Según sostuvo, la sociedad brasileña estaba "conmocionada" por el castigo a su aliado en el Congreso, puesto que este "solo hizo uso de su libertad de expresión".

El ex policía de 39 años fue condenado porque publicó, por ejemplo, un video en el que insultaba a los jueces de la corte suprema, esperando que fueran "apalizados en la calle". Además, el mes pasado copó titulares al atrincherarse en el Congreso para evitar que la policía le colocara una tobillera electrónica.

Al condenarlo, la corte suprema no solo le ordenó una pena de cárcel, sino que además lo inhabilitó para ocupar cargos públicos, dos decisiones que el mandatario dejó sin efecto con su indulto. La decisión presidencial fue criticada por la oposición, especialmente por el ex presidente y favorito para ocupar de nuevo ese cargo tras las elecciones de octubre próximo, Luiz Inácio Lula da Silva. El veterano dirigente calificó al mandatario de "estúpido" y "mediocre": "Creo que Bolsonaro fue estúpido cuando tomó esta decisión porque cree que es una gracia misma, no un beneficio jurídico, sino gracia desde el punto de vista de las risas", sostuvo el líder del Partido de los Trabajadores (PT).