Mientras el presidente brasileño, Luis Inácio Lula da Silva, encabezaba una de las reuniones más importantes entre líderes mundiales, la Policía Federal (PF) reveló la existencia de un plan para matarlo elaborado en medio del proceso de elecciones de 2022. La operación implica a militares del Ejército -involucrados en la estrategia golpista-, que también querían asesinar al entonces candidato a la vicepresidencia Gerardo Alckmin; y al presidente del Supremo Tribunal Federal (STF), Alexandre de Moraes. Hay detenidos.
La trama golpista por la PF comenzó en junio del año pasado. Estaba en el celular del entonces edecán del expresidente Jair Bolsonaro -también apuntado por incentivar el golpe-, Mauro Cid. Ahora, más de un año después, en computadoras y celulares que hallaron en la casa del detenido, con ayuda de equipamiento militar, las autoridades brasileñas dieron con información clave que da cuenta de que los golpistas comenzaron a monitorear los pasos de las autoridades antes del traspaso de mando, al que Bolsonaro no asistió por haber huido antes de tiempo a Estados Unidos.
La Policía, además, afirmó que ese plan fue impreso en el Palacio Planalto, es decir, en la casa de Gobierno, según informó el portal G1. El nombre de fantasía que le dieron a la operación fue “Puñal verde y amarillo”, que iba a ser ejecutado el 15 de diciembre de 2022.
Los detenidos
Las detenciones se dieron luego de que se diera a conocer la “Operación contragolpe”, que libró una serie de detenciones a los sospechosos de haber participado de la estrategia golpista.
Se trata de: el mayor Rafael Martins de Oliveira; el teniente coronel Helio Ferreira Lima, el mayor Rordrigo Bezerra Azevedo; el general de reserva Mário Fernandes -hasta ahora jefe de gabinete de un diputado del Partido Liberal y ex jefe de la secretaría general de la presidencia, en 2022- y el policía federal Wladimir Matos Soares, que además participó como seguridad del hotel de Lula durante la transición.
Fernandes fue caracterizado por la policía como uno de los “más radicales” y como quien imprimió el documento.
Los principales puntos del plan
En el documento los militares analizaron el asesinato por envenenamiento y por fusilamiento de los tres señalados.
“Algunas possibilidades ya fueron levantadas para la acción, mientras, todavía son necesarias las evaluaciones sobre los lugares viables, condiciones para ejecución (tiro a corta, media o larga distancia, empleo de munición y/o artefacto explosivo), posibilidad de refuerzo y protección del objetivo, así como la intervención de otras fuerzas de seguridad” (traducción propia), dice el plan dado a conocer.
“Otra posibilidad fue analizada para el cumplimiento de la Misión, buscando un elemento químico y/o biológico o envenenamiento del objetivo, preferentemente, durante un evento oficial público. Nuestro reconocimiento también está analizando otras condiciones para esa acción”, escribieron.
Según publicaron los medios locales el plan fue discutido en la casa del general Braga Netto, ex ministro de Bolsonaro y candidato a vice en esas últimas elecciones a la presidencia cuyo resultado nunca fue reconocido por el ex mandatario. Estuvieron además de Cid y Braga Netto, Bolsonaro, y los detenidos este martes Ferreira Lima, Fernandes De Oliveira.
El encuentro fue confirmado por el general y ex edecán de Bolsonaro Mauro Cid, que se encuentra detenido y firmó un acuerdo de colaboración con la Justicia.
Varios ataques al mismo tiempo
Según dio a conocer la PF la estrategia contemplaba, también, otros objetivos. Varios al mismo tiempo:
- Ataques virtuales a opositores
- Ataques a las instituciones (Corte Suprema, Tribunal Superior Electoral), al sistema electrónico de votación y a la legitimidad del proceso electoral
- Intento de golpe de Estado y abolición violenta del Estado democrático de derecho,
- Ataques a las vacunas contra la Covid-19 y a las medidas sanitarias durante la pandemia de 2020
- Uso de la estructura del Estado para la obtención de ventajas: utilización de los fondos de tarjetas corporativas para el pago de gastos personales; inserción de datos falsos de vacunación en los sistemas de salud del Ministerio de Salud para falsificar tarjetas de vacunación; desvío de activos de alto valor entregados por autoridades extranjeras al presidente Bolsonaro o a agentes públicos a su servicio; y posterior ocultamiento con el objetivo de enriquecimiento ilícito.
El “gabinete de crisis”
En la estrategia golpista cada paso pareciera haber estado pensado: en caso de asesinato de Lula, Alckmin y De Moraes, por ejemplo, la idea era crear un “gabinete de crisis” para poner como máximas autoridades a los generales Augusto Heleno, entonces ministro jefe del gabinete de Seguridad Institucional; y a Braga Netto.