Llamado a la concordia de líder religioso iraquí trae paz a Bagdad

30 de agosto, 2022 | 16.15

(Agrega declaraciones del presidente iraquí)

Los partidarios del clérigo Muqtada Sadr comenzaron a retirarse hoy de la llamada Zona Verde de Bagdad, considerada la más segura de la capital iraquí, después de que el líder chiita llamara por TV a terminar con los enfrentamientos entre sus partidarios y facciones chiítas apoyadas por Irán, que dejaron 30 muertos y estallaron luego que anunciara su "retiro definitivo" de la política.

Hoy, momentos después de que el discurso de Sadr fuera transmitido en directo por televisión, sus partidarios empezaron a abandonar la Zona Verde y posteriormente el Ejército levantó el toque de queda que había decretado en todo el país. 

Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.

SUSCRIBITE A EL DESTAPE

Sadr, un predicador con millones de seguidores que tras la invasión de Irak, encabezada por Estados Unidos en marzo de 2003, lideró una milicia contra los ocupantes, dio a sus seguidores "60 minutos" para retirarse, después de lo cual amenazaba con "desautorizar" a los que se quedaran.

"Pido disculpas al pueblo iraquí, los únicos afectados por los acontecimientos", dijo Sadr a los periodistas desde su base, en la ciudad iraquí de Najaf, informó la agencia de noticias AFP.

El primer ministro iraquí, Mustafa Al Kadhimi, alabó el pedido de retiro de sus partidarios y su llamado a la paz.

"El llamado de su eminencia Muqtada al Sadr a poner fin a la violencia representa el epítome del patriotismo y el respeto a la santidad de la sangre iraquí", escribió Al Kadhimi en su cuenta de Twitter.

El discurso, continuó, impone a todas las partes "el deber nacional y moral" de detener la escalada política y entablar un diálogo.

También el presidente iraquí, Barham Salih, agradeció la posición "responsable" del clérigo y sugirió que es momento de celebrar elecciones legislativas anticipadas para ayudar al país a salir de esta crisis política, reportó la agencia iraquí de noticias INA.

"La celebración de nuevas elecciones anticipadas (al Parlamento) sería una salida a la crisis asfixiante en Irak", dijo el mandatario en una alocución al pueblo, en la que subrayó que el país necesita "reformas del sistema de gestión".

"Necesitamos serias reformas para eliminar los errores acumulados en el sistema de gestión", agregó Salih, al señalar que se necesita un diálogo entre el Gobierno federal y las autoridades del Kurdistán iraquí.

Los enfrentamientos entre grupos rivales iraquíes se habían reanudado más temprano en Bagdad, luego de que partidarios del poderoso clérigo irrumpieran ayer en el Palacio Republicano -sede del gobierno durante la ocupación estadounidense- tras el anuncio del líder chiita de que se retirará definitivamente de la política en plena crisis institucional.

Al menos 700 personas resultaron heridas por la violencia surgida en la Zona Verde de la capital iraquí, un perímetro de alta seguridad que alberga ministerios y embajadas y al Palacio Republicano, de acuerdo con portavoces oficiales.

Tras una noche tranquila, de madrugada se reanudaron los enfrentamientos entre los seguidores de Sadr y el ejército y los hombres del grupo Hashed al Shabi (Unidades de Movilización Popular, PMU), antiguos paramilitares proiraníes ahora integrados en las fuerzas regulares.

Los disparos de armas automáticas y de cohetes procedentes de la Zona Verde resonaban por todo Bagdad, dijeron corresponsales de la agencia AFP.

Además, la oficina de prensa de las fuerzas de seguridad iraquíes tuiteó que por la mañana de este martes cuatro misiles cayeron en la Zona Verde, dañando a un complejo residencial.

Las fuerzas de seguridad concluyeron que los misiles fueron lanzados desde los distritos Habibiya y Baladiyat, al este de Bagdad.

El Gobierno iraquí había anunciado que el toque de queda en vigencia desde anoche en todo el país se iba a mantener este martes, por lo que escuelas, administraciones y comercios permanecían cerrados, pero fue retirado tras llegada la calma.

Las fuerzas políticas chiitas, especialmente la de Sadr, no consiguen ponerse de acuerdo en un nuevo primer ministro y un nuevo Gobierno.

Diversos Gobiernos, como los de Rusia y Turquía, llamaron a la calma a los iraquíes, y las autoridades de Irán organizaron incluso un vuelo de repatriación para sus compatriotas atrapados en el aeropuerto de Bagdad y en otras ciudades de Irak, informó la agencia YJC, citando a la Autoridad de Aviación Civil persa.

Con información de Télam