“Desde marzo las prologadas crisis en Haití impulsan un aumento del desplazamiento del 60%”, es el título del informe que publicó la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) de las Naciones Unidas que tiene asiento en la isla. Según los datos recolectados, unas 578.074 mil personas huyeron de sus casas en los últimos tres meses como consecuencia de la violencia por parte de organizaciones criminales, así como por la crisis social, política, institucional y económica.
“Las cifras que vemos son una consecuencia directa de muchos años de violencia en aumento – que alcanzó un nuevo pico en febrero – y su catastrófico impacto humanitario”, dijo Philippe Branchat, Jefe de Misión de la OIM Haití. Apuntó que “pareciera no tener fin” y empuja a más y más personas a irse de sus hogares. “No es una decisión que tomen a la ligera ni tampoco es la primera vez que ocurre”, sostuvo sobre la situación que afecta a las 10 millones de personas que habitan en el país, pero que tiene su epicentro en la capital de Puerto Príncipe. Según los datos del informe, el 54% son mujeres y el 52% niños y niñas.
La crisis institucional, política y económica hace décadas asedia al país, pero uno de los puntos de inflexión fue en marzo, cuando las bandas criminales aprovecharon un viaje del entonces primer ministro Ariel Henry para exigirle su renuncia. Tras tres meses de discusión política, el Consejo Presidencial de Transición eligió a Garry Conille como quien ocupará ese lugar e intenta restablecer el orden y se propone la celebración de elecciones, que no se realizan desde 2016.
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Crisis humanitaria
El aumento en el número de personas desplazadas se debe, en gran medida, a personas que huyen de Puerto Príncipe hacia otras provincias, que carecen de recursos para atenderlos, según el informe.
En la región sur del país, golpeada por el terremoto de 2021, el número de desplazados internos pasó de 116.000 personas a 270.000 en los últimos tres meses. Desde la OIM, además, señalaron que, desde finales de febrero, la circulación de medicamentos y combustible entre la capital y las provincias se vio seriamente limitada, lo que agrava aún más la crisis humanitaria.
En el área metropolitana de la capital, dos tercios de los desplazados viven en campamentos improvisados con un acceso muy limitado a los servicios básicos. En la actualidad, 39 de los 96 asentamientos activos albergan a 61.000 personas, lo que dificulta seriamente la asistencia escolar.
Más allá de las dificultades para operar para las organizaciones internacionales, desde la ONU desde el comienzo del conflicto proporcionaron casi cinco millones de litros de agua potable a unas 25.000 personas y más de 37.000 personas recibieron suministros de emergencia, entre ellos mantas, lámparas solares y utensilios de cocina.
Misión internacional
La misión internacional al frente de Kenia –que incluye el envío de policías- fue uno de los disparadores de la violencia y las amenazas por parte de las organizaciones criminales, sin embargo, una reunión entre el referente de la fuerza policial de ese país y la haitiana confirmó que la iniciativa sigue en pie. La misión fue aprobada por el Consejo de Seguridad de la ONU.
Además, cuenta con el apoyo del alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, Volker Türk, que este martes en la inauguración de sesiones del organismo, pidió que la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad en Haití intervenga de forma "urgente" para hacer frente a la crisis de inseguridad que vive el país.