La Unión Industrial Argentina (UIA) advirtió sobre el impacto negativo que tendrá en la industria textil la reducción de aranceles a la importación de ropa y calzado, anunciada por el ministro de Economía, Luis Caputo. En La Rioja, donde se encuentra uno de los tres polos textiles más importantes del país, la medida genera gran preocupación.
El Gobierno nacional informó que los aranceles bajarán del 35% al 20% en ropa y calzado; del 26% al 18% en telas; y del 18% a entre 12% y 16% en distintos hilados. Desde la UIA calificaron la decisión como "preocupante" y señalaron que "la competencia frente a las importaciones de bienes finales se torna desigual y desleal".


Además, la entidad industrial alertó sobre la falta de medidas para mejorar la competitividad local. "Es preocupante que la agenda de integración comercial no esté acompañada de una agenda de competitividad dentro del país", afirmaron en un comunicado. También denunciaron que el sector ya enfrenta problemas como el comercio ilegal, el contrabando y la falsificación de marcas.
Según un relevamiento del CEU-UIA, el 33% de las empresas consultadas afirmaron estar afectadas por el contrabando, cifra que asciende al 80% en el sector textil. En La Rioja, el Parque Industrial atraviesa una crisis por la caída de ventas, lo que ya ha generado despidos sin causa. Las empresas advierten que la medida podría agravar aún más la situación.
La producción textil cayó y solo un tercio de la maquinaria se encuentra activa
Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), las empresas textiles del país operan con apenas un tercio de la capacidad instalada. En enero de 2025, el sector utilizó solo el 33,9% de sus máquinas disponibles para producir, lo que refleja una caída del 2,8% en comparación con el mismo mes del año anterior. Esto afecta directamente a La Rioja, provincia que tiene una importante producción en el rubro.
El informe del INDEC mide la utilización de la capacidad instalada en la industria mediante un relevamiento que involucra entre 600 y 700 empresas en todo el país. En el caso de la industria textil, la situación se agrava si se compara con noviembre de 2023, cuando el sector operaba al 59,1%. Esto significa que la producción actual está 22 puntos porcentuales por debajo de ese nivel, lo que evidencia una drástica retracción.
Esta brusca disminución de la actividad está directamente vinculada a la caída en las ventas de indumentaria. La menor demanda por parte de los comercios repercute en una reducción de la producción, lo que genera una disminución en la utilización de maquinaria industrial.
El impacto de esta crisis es particularmente grave en la provincia de La Rioja, donde el sector textil y de confección concentra más del 50% de los puestos de trabajo en el Parque Industrial. Además, junto con Catamarca, La Rioja representa cerca del 40% de la producción nacional del rubro, lo que acentúa la preocupación por el futuro del empleo en la región.
En el contexto general de la industria argentina, el informe del INDEC confirma que la utilización de la capacidad instalada se encuentra en niveles críticos. La tendencia a la baja en diversos sectores productivos refuerza la preocupación por el impacto en el empleo y la economía del país. Cabe destacar que se tomaron como referencia los datos oficiales correspondientes a enero de 2025 publicados en el informe mensual del INDEC.