El Kremlin afirmó el jueves que cualquier nueva ayuda militar estadounidense a Ucrania no cambiaría la situación en el frente, donde las fuerzas de Kiev se encuentran en una mala posición, e incluyó dicha ayuda en el marco de una política "colonial" que enriquece a Estados Unidos.
Mike Johnson, presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, indicó que celebrará una votación largamente esperada sobre un nuevo paquete de ayuda, algo que podría ocurrir el sábado. El paquete propuesto incluye 60.840 millones de dólares para hacer frente al conflicto en Ucrania, de los cuales 23.200 millones se utilizarían para reponer las armas, reservas e instalaciones estadounidenses.
Aunque la Unión Europea ha prometido más ayuda en general, Estados Unidos ha dado con diferencia la mayor contribución militar para ayudar a Ucrania a luchar contra Rusia.
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"Ucrania no sólo tiene que luchar para proporcionar beneficios a los estadounidenses, sino que también tiene que luchar hasta el último ucraniano y está cargada de deudas", dijo el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov. "La política colonial favorita de Estados Unidos".
Peskov señaló que una parte "muy significativa" de la ayuda propuesta se quedaría en el complejo militar-industrial estadounidense.
"Todos los expertos y semiexpertos pueden ver ahora a simple vista la situación en el frente, que dista mucho de ser favorable para la parte ucraniana, así que esto no puede cambiar nada", dijo Peskov sobre el paquete de ayuda.
Rusia controla cerca del 18% de Ucrania y los líderes y jefes de espionaje occidentales afirman que la guerra se encuentra en una encrucijada que podría conducir a la victoria rusa y a la humillación de Occidente, a menos que Ucrania obtenga urgentemente más apoyo.
Con información de Reuters
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