La Cámara de Diputados de la Nación organizó un encuentro para visibilizar cuál es la situación en el país con respecto a la incidencia y manejo del accidente cerebrovascular (ACV), que constituye la segunda causa de muerte y la primera de discapacidad en la Argentina y en el mundo.
La actividad se llevó a cabo en el Salón Blanco del Congreso y contó con la participación de diputadas y diputados nacionales, autoridades del sistema de salud y los principales actores del área, quienes coincidieron en que la gran variable en este asunto es el tiempo. En ese sentido, los oradores hicieron hincapié en la importancia de la concientización para prevenir casos, en el diagnóstico precoz y en el tratamiento rápido, al tratarse de una patología donde cada minuto es determinante.
Señalaron que en la Argentina ocurren aproximadamente 120.000 casos anuales que representan 40.000 muertes y 40.000 nuevas personas con discapacidad cada año. Al respecto, advirtieron que para disminuir estos índices es fundamental contar con una ley nacional que incorpore al ACV al Plan Médico Obligatorio para garantizar la equidad y la inclusión y que, entre otros puntos, se conforme una red nacional de ACV. También concluyeron que la educación de la población es sustancial.
La diputada nacional y presidenta de la Comisión de Salud, Mónica Fein, recordó que existen dos proyectos de ley con estado parlamentario –de autoría de Rossana Chahla y Rubén Manzi- y sostuvo que el aporte de los expertos permitirá nutrir el debate legislativo. “Es un desafío dentro del sistema de salud. Fortalecer la detección precoz y garantizar el tratamiento oportuno es fundamental”, precisó. El vicepresidente de la Comisión de Salud, Daniel Gollán, repasó que “cuanto más rápido se detecten los síntomas y se atienda al paciente, más posibilidad de disminuir o evitar secuelas”.
Por su parte, el diputado nacional Rubén Manzi destacó que la concientización permitirá reducir los casos y puso de relieve que “en el cerebro el tiempo es vida o secuela”. Asimismo, la diputada nacional Rossana Chahla señaló a través de un comunicado que el objetivo es robustecer la prevención así como también garantizar la cobertura del 100% en el diagnóstico y tratamiento. “Tenemos que trabajar en coordinación con toda la comunidad, Estado, laboratorios, obras sociales, medios de comunicación para salvar vidas”, enfatizó.
Posteriormente, Andrea Peve, ministra de Salud de Neuquén, subrayó que la provincia patagónica es la única del país que cuenta con una ley de ACV sancionada y reglamentada. Se trata de la Ley N° 3263/20, que “garantiza el acceso de la población a la prevención, diagnóstico, tratamiento, rehabilitación y seguimiento del ACV”. “Esta Ley es necesaria en toda la República Argentina”, apuntó.
Por otro lado, María Soledad Santini, miembro del Consejo Científico Académico de la OCAL y moderadora de la mesa, consideró a la salud como “un proceso transdisciplinario donde a la enfermedad hay que entenderla en un contexto, en una cultura e incluso también hay que comprender la importancia que tiene legislar para pensar salud”. “La salud es responsabilidad de todas y todos”, planteó.
También participaron Guadalupe Bruera, coordinadora de la Unidad de Enfermedades Neurológicas Vasculares Agudas del Hospital Privado de Rosario, y Miriam Vicente, directora médica del Centro de Neurociencias de Neuquén. Otros presentes fueron Natalia Vensentini, coordinadora del Programa Nacional de Prevención y Control de Enfermedades Cardiovasculares del Ministerio de Salud de la Nación; Ignacio Brusco, decano de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires; y Julio Fernández, director del Programa de Accidentes Cerebrovasculares del Ministerio de Salud Pública de Tucumán.
Además, asistieron Mariana Montes, presidenta de la Sociedad Argentina de Emergencias; Silvia Garbugino, presidenta del Colegio Argentino de Neurointervencionistas; Mariela Alderete, presidenta de la Asociación Por una Vida Libre de ACV; y Rolando Enrique Cárdenas Sánchez, presidente de la Fundación ACV Vida. La mesa se completó con Perla Pahnke, médica emergentóloga y terapista del Hospital Municipal de Urgencia de Córdoba; María Marta Esnaola, médica neuróloga del Hospital Dr. César Milstein; Gabriela Orzuza, jefa de la Unidad de Ataques Cerebrovasculares del Hospital San Bernardo; y Eloy Mansilla Lucero, director médico de la Universidad de Chile.