(Por Sergio Arboleya) El reconocido bailarín y coreógrafo español Antonio Najarro pondrá fin, con tres funciones en el porteño Teatro Coliseo, a la larga gira de estreno de “Querencia”, un espectáculo de danza española con el que, advierte, quiso volver a lo que es el “legado” tradicional “pero presentándolo con la mayor actualidad”.
La puesta asumida por un elenco de 14 intérpretes y sostenida por música original y por un vestuario creado para la ocasión busca potenciar y traer al presente las raíces de la danza española aunque, según especifica el mentor de “Querencia”, “sin la pretensión de innovar”.
“En mis creaciones no fuerzo nada porque no estoy pensando en innovar sino en transmitir a partir de mis vivencias y de lo que respiro. Pongo el foco en esa esencia y es ella la que está presente en todo el espectáculo”, asegura Najarro durante una entrevista con Télam.
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Desde Santiago de Chile, donde con cuatro veladas construye la penúltima parada de la serie de presentaciones de “Querencia” que comenzó en mayo de 2022 en España, Najarro se apresta a volver a Buenos Aires para montar su más reciente creación en el Teatro Coliseo.
En la sala sita en Marcelo T. de Alvear 1125, el espectáculo con 11 cuadros sobre música original compuesta por Moisés Sánchez y grabada por la Orquesta de Extremadura, podrá verse el jueves 3 y viernes 4 de agosto a las 20.30 y el sábado 5 a las 21.30.
La puesta incluye protagónicos aportes del vestuario diseñado por Yaiza Pinillos y de la iluminación escenográfica creada por Pau Fullana.
El artista, nacido hace 47 años en Madrid y dueño de una laureada trayectoria, dio forma a esta nueva propuesta de su compañía (que originalmente creó en 2002 y ostenta otros cinco títulos) tras ocho años entre 2011 y 2019 de estar al mando del Ballet Nacional de España.
Télam: ¿Puede pensarse que tu trabajo con el Ballet Nacional de España (BNE) fue el que propició el nacimiento de “Querencia”?
Antonio Najarro: Sin lugar a dudas el haber trabajado con el Ballet Nacional español me motivó a volver a nuestras tradiciones, a nuestras danzas. De hecho, con mi propia compañía privada, más bien hasta aquí había optado por las fusiones como lo demuestran desde los títulos los espectáculos “Tango Flamenco” (2002), “Flamencoriental” (2006), “Jazzing Flamenco” (2008), “Suite Sevilla” (2011) y “Alento” (2020), muchos de ellos con un quinteto de músicos liderado por el guitarrista argentino Fernando Egozcue.
Al dirigir a nuestro Ballet Nacional sentí que tenía la responsabilidad de continuar con ese lenguaje tratando de adosarle excelencia y para que además del BNE haya otra referencia de la danza española.
T: ¿Qué destacarías de la danza española como escuela?
AN: Aunque el flamenco quizás sea la danza española más conocida internacionalmente, en “Querencia” también asumimos otras ricas escuelas, como la bolera, la estilizada y la del folclore. Todas ellas requieren de un dominio técnico tremendo como el que se le exige a cualquier bailarín clásico y en ella se encierra, además de un exponente artístico de la cultura de España, algo que remite a todas las danzas del mundo. En la danza española hay energía, expresión, dramatismo, romanticismo, y considero que versatilidad es la palabra que mejor la define.
T: Tras tu salida del Ballet Nacional y la creación de “Alento” ¿Cuánto tiempo llevó crear “Querencia”?
AN: El proceso de “Querencia” ha sido de aproximadamente dos años partiendo desde la composición a piano de Moisés Sánchez inspirada en grandes compositores pero desde un sello muy nuevo.
T: ¿Qué balance hay del recorrido y la repercusión del espectáculo?
AN: Sinceramente estoy un poco abrumado del éxito que hemos tenido en toda España y en Francia también. Y para el año que viene hay prevista una gira que llegará a China y Japón.
T: En Argentina y por la inmigración, pero no solamente por ella, hay un gran interés en la cultura española. ¿Con qué expectativas se llega a estas funciones en Buenos Aires?
AN: Al público argentino tengo que agradecerle de todo corazón por el apoyo y el cariño que sentí hace cinco años cuando fui con el BNE, y siento que “Querencia” es una gran manera de expresarle esa gratitud.
T: Al trabajar con la tradición, ¿hubo temor a recibir críticas de algún público más conservador?
AN: He tenido la gran suerte de poder estudiar y formarme con los más grandes de la danza española y por ello conozco perfectamente sus raíces, esa esencia está presente en todo el espectáculo y siempre se respetan la tradición y las bases.
T: ¿Puede pensarse en la paradoja de que una propuesta de danza nacional tenga impacto a nivel planetario?
AN: Hemos trabajado para tener un circuito universal. Soy un creador que concibo que mis espectáculos tienen que ser comerciales con mayúsculas para que el público salga de ellos sintiendo algo diferente y con una emoción nueva en sus corazones.
Con información de Télam
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