El filme argentino "Las siamesas", de la realizadora argentina Paula Hernández, compite hoy por el galardón a Mejor Película Iberoamericana de los Premios Goya que entrega la Academia de Cine española.
La cinta de Hernández, que se vio en el último Festival de Mar del Plata, deberá batallar contra los filmes "Cordillera de los sueños", del veterano y notable documentalista chileno Patricio Guzmán; "Canción sin nombre", de la peruana Melisa León y la película mexicana "Los lobos", de Samuel Kishi.
Los Goya, máxima, distinción que entrega la industria española a la producción anual del cine de ese país e Iberoamérica, ofrecerá hoy su 36ma edición con una gala presencial de premiación que se desarrollará desde las 18 (hora argentina) en el Palau de les Arts de Valencia y que puede ser seguida online a través de RTVE Play o del canal Televisión Española (TVE) de los operadores de cable.
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"El buen patrón", un filme que habla del perdón y la revisión del pasado y trata sobre un asesinato perpetrado por la organización separatista vasca ETA, una viuda y un excombatiente arrepentido, es el máximo favorito de la cita valenciana, con 20 nominaciones, la mayor cantidad de candidaturas reunidas por una película en toda la historia de los Goya.
Entre las favoritas también están "Maixabel", de la realizadora Icíar Bollaín con 14 candidaturas y "Madres paralelas", de Pedro Almodóvar, entre las que distingue la nominación de Penélope a Mejor Actriz, candidatura que la madrileña también repite en los Oscar.
"Las siamesas", de Hernández, cuenta con un guion basado en un texto de Guillermo Saccomanno y tiene los protagónicos de Rita Cortese y Valeria Lois.
La película cuenta un viaje en micro a la Costa Atlántica de madre (Cortese) e hija (Lois), quienes tienen una relación absorbente y enfermiza y que en una noche dentro de un micro vacío estalla en mil pedazos.
Amor, celos y costumbrismo es lo que Hernández supo llevar a la pantalla grande con un película que ella misma calificó como "pequeña", en comparación a su antecesora "Los Sonámbulos", la cual también fue elegida para ir a los Goya.
"Es una metáfora del desapego. Es una road movie bajo el manto de una tormenta, que no simplemente tiene que ver con lo externo, sino con lo que se va gestando en ese viaje y lo que se dicen respecto del pasado y lo presente. Ese encierro es temporal y emocional y el colectivo de alguna manera da un espacio propicio porque no tienen otra opción", dijo en su momento Hernández a Télam.
Con información de Télam
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