(Por Hugo Fernando Sánchez, enviado especial).- Casi en el cierre del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata, que mañana entrega los premios de esta edición, el director del Festival de San Sebastián en España, José Luis Rebordinos, llegó a la ciudad para expresar su apoyo al certamen y tener un panorama del rumbo del único Festival "Clase A" de Latinoamérica.
Rebordinos habló con Télam en uno de los inmensos salones del Gran Hotel Provincial y lo primero que destacó sobre los motivos de su visita es que "he notado en los últimos años, que con la dirección de Cecilia Barrionuevo y Fernando Juan Lima, se le dio un giro muy interesante al festival".
La visita de José Luis Rebordinos cobra una particular relevancia para Mar del Plata, en tanto el Festival de San Sebastián a través de su director expresa una muestra de confianza hacia el festival que se realiza en la Argentina en una edición difícil, la segunda en pandemia y que hace apenas dos meses pudo sumar confirmar la presencia del público en salas, con un aforo de 80 por ciento.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Télam: ¿Cuáles son los motivos de su visita a Mar del Plata, qué tiene de particular esta edición?
José Luis Rebordinos: Vengo a Mar del Plata porque he notado en los últimos años que con la dirección de Cecilia Barrionuevo y Fernando Juan Lima, se le dio un giro muy interesante al festival. Voy a ser sincero, este es un festival que fue muy importante y que en los últimos años la fue perdiendo y creo que ahora algo está cambiando para bien.
Este año Mar del Plata tiene una programación muy interesante, a pesar que estamos saliendo de la pandemia, se nota que hay un criterio en la selección, hay una gran presencia latinoamericana y argentina, por eso vengo con muchas expectativas de ver qué está pasando.
T: ¿Qué tendría que reunir el Festival de Mar del Plata para retomar la relevancia que tenía antes?
JLR: Para que funcione, un festival tiene que ser una mezcla de cosas, necesitará una parte de glamour, su pequeña parte de industria, etc. Pero para mí, para un festival como San Sebastián y para muchos de los que venimos de Europa, lo que esperamos de este festival es poder ver cómo está el cine latinoamericano y sobre todo el argentino, que es el cine más poderoso de la región. El festival de Mar del Plata puede ser un gran escaparate del cine latinoamericano y si se lo coordina con Ventana Sur, que se va a realizar la semana que viene en Buenos Aires y es el mercado más importante del cine latinoamericano que hay en todo el continente, en una muy buena oportunidad de cumplir con las dos citas.
T: ¿Existe la posibilidad de que Mar del Plata y San Sebastián tengan algún proyecto en común?
JLR: Es verdad que nos une una gran amistad y por qué no, en el futuro próximo podríamos trabajar en algún proyecto, porque insisto, estamos viendo un giro en Mar del Plata, una línea editorial que nos gusta.
T: ¿Cuál es su mirada sobre cómo afecto la pandemia a los festivales y en especial al que usted dirige?
JLR: Bueno nosotros somos partidarios de los festivales presenciales, dejamos bien claro que nunca hubiéramos hecho una edición online y antes de hacerla, la hubiéramos suspendido, a pesar de los costos que eso hubiera representado. A las películas hay que verlas en una sala de cine.
Al final hicimos una edición presencial para las películas y online para las actividades de la industria y este año ha sido un poco parecido.
Todo esto nos ha supuesto tener que pelear mucho para poder cuadrar los presupuestos, porque hay que tener en cuenta que San Sebastián es un festival de público, en donde en 2019 metimos 178 mil espectadores y ahora, con salas al 50 por ciento por las restricciones de la pandemia, nos hizo perder 600 mil euros.
Cualquier definición de un festival tiene que ver con un lugar de encuentro, esperamos el año que viene retomar las actividades de manera normal, hay festivales que tuvieron que hacer su versión online porque cada festival, cada país y cada situación es diferente, cada uno hizo lo que pudo.
Con información de Télam