(Por Hernani Natale) No parecieran haber pasado 31 años desde la única visita hasta el momento a la Argentina de Billy Idol, a juzgar por la potencia desplegada en los dos shows ofrecidos el pasado domingo 11 en Vélez como invitado especial de Green Day y anoche en el Luna Park-, lo intacta que mantiene su estampa y la vigencia musical mostrada en sus más recientes trabajos.
Es que además de hacer gala de lo inoxidable de sus clásicos, como el caso de Dancing With Myself, Eyes Without a Face, Cradle of Love y Rebel Yell, entre tantos; el icónico artista sorprendió con algunas canciones de The Cage, el EP que será lanzado el próximo 23 de septiembre.
Precisamente y como otra prueba de su intacta energía-, Billy Idol ofreció ayer a la tarde, poco antes de su concierto en el Luna Park, una conferencia de prensa en el porteño hotel Four Seasons para hablar sobre la placa de la cual dio a conocer el tema que le da nombre y Running From The Ghost.
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Allí, el hombre que ingresó al salón haciendo sus clásicas poses y gestos rockeros para las cámaras, los mismos que surgieron al inicio de su camino en la seminal escena punk londinense de los `70, se puso reflexivo cuando se abrieron los micrófonos.
Del mismo modo, inició sus recuerdos de su anterior paso por Argentina haciendo la típica alusión a las chicas más lindas y no titubeó en reconocer el efecto erótico de su música en toda una generación, pero también se puso más serio y habló de la lucha que dio contra las adicciones y los monstruos que aparecieron en pandemia; o mostró su costado más tierno cuando contó que una canción de The Cage está dedicada a su nieta.
Precisamente, esa madurez aparece reflejada en las dos canciones anticipadas del EP, que mantienen la fuerza musical que caracterizó a este artista, pero presentan una profundidad en las antípodas de sus cachondos hits ochentosos.
Pero como explicó él mismo, la música de Billy Idol mantuvo un carácter a lo largo de todo su recorrido, sin importar si se trata del punk rock de Generation X, su banda londinense; los grandes éxitos de su carrera solista en Estados Unidos en los `80 o de The Cage.
Es cierto que empecé en la escena del punk rock con Generation X pero cuando fui a (norte) América para continuar mi carrera solista, decidí que iba a hacer la música de Billy Idol, o sea mi propia música. Allí están mis sentimientos, mis deseos, mi voluntad, sea o no punk rock. No sé si ´The Cage´ es punk rock. Hago muchos estilos de música pero siempre con una actitud punk detrás, expresó el artista ante una consulta de Télam.
Al igual que la actitud punk rock, Billy Idol también mantiene a lo largo del tiempo su capacidad creativa, la cual siempre encuentra un socio, según reconoció; un lugar que hace varios años tiene reservado el guitarrista Steve Stevens.
El álbum está inspirado en la pandemia, tuve que hacer frente a mis propios monstruos tratando de entrar por la ventana. Fue escrito en pandemia pero no tiene que ver solo con eso, sino con cualquier otro ámbito donde uno se sienta preso, sentenció, a la vez que puntualizó que Running From The Ghost remite a la lucha contra las adicciones que encaró junto al guitarrista.
Me enamoré del rock and roll en 1966 y decidí que esa sería mi vida. De ahí sale la inspiración para mis letras, también de mis sentimientos, el ambiente político, mis amigos. Es importante estar atento a esto para ser fiel a lo que uno siente, señaló.
Su nieta, quien aseguró con visible orgullo que suele decir que le encanta la canción Dancing With Myself, también fue una fuente de inspiración, aunque aún no se dio a conocer ese corte.
The Cage, que será lanzado por el sello Dark Horse, creación del beatle George Harrison, actualmente está a cargo de su único hijo Dhani, sucederá a The Roadside, su trabajo de 2020 que volvió a ponerlo en la ruta.
En esa placa anterior está la canción Bitter Taste, otra de las obras mostradas en esta visita, que también presenta a un Billy Idol más serio en sus temáticas y oscuro en su sonido, aunque con el vigor intacto.
Mi música provoca muchas cosas. A veces estás enojado y a veces tenés ganas de hacer el amor. Quiero usar mi música para comunicar todo eso, manifestó, como si no hubiera tanta diferencia entre sus canciones de hace 30 años y sus nuevas composiciones. Al fin y al cabo, todas ellas tienen una irrenunciable actitud punk rock.
Con información de Télam