El plan 4 x 4 del gobierno para YPF: entre venta de activos y desarrollo de Vaca Muerta

El nuevo presidente de YPF puso rápidamente el foco en acelerar la producción en Vaca Muerta. Para esto, planea desprenderse de otras áreas petroleras y podría vender activos y empresas de la propia compañía.

13 de febrero, 2024 | 23.03

En los 66 días que lleva el gobierno de Javier Milei resaltan varias características con las que quiere implementar las reformas en el Estado. Una de ellas es la velocidad con que intenta aplicar las políticas económicas y otra es la variedad de frente que abre al mismo tiempo, incluso fracasando, como le ocurrió en el Congreso con el proyecto de Ley Ómnibus. En el Plan 4x4 que impulsa el nuevo presidente y CEO de YPF, Horacio Marín, que viene de un largo paso por Tecpetrol (grupo Techint), la velocidad y variedad de temas son centrales. Sin perder tiempo, el nuevo líder de la compañía bajo control estatal ya comenzó a implementar el programa estratégico donde piensa acelerar el desarrollo -casi en exclusiva- de los hidrocarburos no convencionales de Vaca Muerta. Para alcanzar esta meta, la intención es desinvertir y vender otros activos de la compañía.

La privatización de YPF quedó congelada. Pero Marín pretende desprenderse rápidamente de áreas que la compañía tiene en distintas provincias petroleras (ya comenzó con 10 áreas en Santa Cruz) y, al mismo tiempo, podría avanzar en la venta de activos que YPF tiene en los sectores de energía, petroquímica y de fertilizantes, según el plan de Marín.

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YPF es el accionista mayoritario y controlante de Metrogas, la principal distribuidora de gas del país, pero, además, cuenta con el 50% de Profertil (el otro 50% es del gigante canadiense Nutrien), que es la principal empresa de fertilizantes para el agro del país y abastece con urea granulada a la mitad del mercado local. YPF también es el accionista mayoritario (38%) de MEGA (34% Petrobras y 28% Dow), líder en la industria del gas (produce etano, gasolina, propano y butano) y es una de las principales petroquímicas de la Argentina.

Además, YPF cuenta con Y-TEC (tecnología y desarrollo en litio junto al Conicet), YPF Luz (parques renovables y generación térmica) e YPF Agro, entre otras divisiones y participaciones accionarias en otras compañías. Si bien no se detuvieron, tampoco hay grandes definiciones por el momento sobre qué hará YPF con el proyecto Palermo Aike (explora junto a CGC, la petrolera del empresario Eurnekian), el campo de petróleo y gas no convencional del sur de Santa Cruz que podría representar un tercio de Vaca Muerta, ni con la exploración offshore en el Mar Argentino.

Plan 4x4

Se trata de cuatro objetivos para “cuadruplicar en cuatro años el valor de la compañía”, según describió el propio Horacio Marín. El primero es acelerar a fondo la inversión en Vaca Muerta para desarrollar el shale gas y shale oil. Para esto, Marín ya comenzó con el segundo objetivo, que es el desprendimiento de activos de YPF para conseguir fondos para invertir en Vaca Muerta. El punto dos del Plan 4x4 incluye la reversión de áreas convencionales (maduras) en provincias petroleras.

La intención es vender áreas o asociarse con otras petroleras. El argumento es que estos campos tienen altos costos operativos y que YPF no puede afrontarlos. En definitiva, es una desinversión de la compañía. Ya comenzó por Santa Cruz, donde acordó con el gobernador Claudio Vidal, un dirigente de los trabajadores petroleros que ganó las elecciones en 2023, la reversión a la provincia de 10 áreas que tenía YPF.

Pero ahora, también con velocidad, está avanzando en negociaciones con Mendoza, Chubut, Neuquén y Río Negro para revertir bloques o, directamente, venderlos. Según ya circula en el sector, Milei indicó que en seis meses este objetivo del Plan 4x4 tiene que estar resuelto: en junio YPF tiene que haberse desprendido de la gran mayoría de las áreas convencionales que tiene en las provincias. En este sentido, un dato relevante es que YPF es el segundo productor de crudo convencional en la cuenca del Golfo San Jorge (Chubut y norte de Santa Cruz), detrás de Pan American Energy (PAE), que lidera el ranking de producción en esa zona hace años.

En los hechos, el Plan 4x4 de Marín es que YPF se quede con una parte reducida de la operación de las áreas maduras (convencionales). El objetivo es pasar de una relación 50% de producción convencional y 50% no convencional (Vaca Muerta) a 20% convencional (campos maduros) a 80% no convencional, según explicó el líder de la compañía. Esta retirada de YPF de las provincias petroleras podría ser una amenaza a la “paz social” en el sector, porque la desinversión podría desencadenar en pérdida de puestos de trabajo y crecimiento de la conflictividad. Este es otro punto donde Milei puede chocar en las próximas semanas con gobernadores como Vidal (Santa Cruz), Rolando Figueroa (Neuquén); Ignacio Torres (Chubut); Alberto Weretilneck (Río Negro); y Alfredo Cornejo (Mendoza). En principio, Marín ya se reunió con los mandatarios provinciales para intentar avanzar en una definición.

Industrialización y GNL

El tercer objetivo del plan estratégico es la aceleración del proceso de industrialización de Vaca Muerta. Se busca ir a un modelo de factoría para aumentar los niveles de productividad de los pozos y mejorar la eficiencia en la operación. Para esto, Marín reorganizó el equipo de management de la compañía con gente de su confianza. El plan es imitar el modelo “fábrica” que ya implementó el propio Marín en Vaca Muerta cuando estaba en Tecpetrol en el área de shale gas Fortín de Piedra, el principal campo de gas no convencional de la cuenca Neuquina.

El cuarto objetivo del Plan 4x4 es el único a largo plazo. Se trata de avanzar con el proyecto de exportación de gas natural de Vaca Muerta a partir de la planta de licuefacción que YPF piensa construir con la petrolera malaya Petronas como principal socio. La meta es ambiciosa, pero la intención es que YPF encabece la exportación de Gas Natural Licuado (GNL) desde Bahía Blanca en cuatro o cinco años.