El Instituto Argentino de Petróleo y Gas (IAPG) remarcó la importancia de la autorización del Gobierno a la exploración offshore frente a la Costa bonaerense, y subrayó la necesidad del gas para la transición energética nacional. A través de un comunicado, recordó que esta actividad comenzó en el país hace 90 años, con diversos beneficios y estrictos controles medioambientales.
“Se trata de una iniciativa del Estado Nacional y no de empresas extranjeras que vienen a ‘saquear’ un recurso local”, indicaron desde el IAPG en un escrito enfocado en realizar “algunas aclaraciones” sobre el proyecto que promueve el Gobierno. Además, remarcaron que “es el propio Estado el interesado en el desarrollo del recurso e invita al sector privado a participar, como ocurre en la mayoría de los países”.
A su vez, precisaron que “esto no es nada nuevo”. Y agregaron: “La Argentina busca hidrocarburos en su mar desde hace más de 90 años. Desde entonces, se han perforado 187 pozos en el lecho marino y se han producido algunos hallazgos de interés, sin incidentes ambientales significativos”.
Para ejemplificar, señalaron que “desde hace décadas existe producción de gas en pozos marinos de la Cuenca Austral (Tierra del Fuego y sur de Santa Cruz). Y, de hecho, el 17% del gas que producimos en el país (y que se relaciona con tu consumo) viene hoy de 36 pozos operativos en el mar”.
“Durante más de medio siglo de búsqueda en lecho del Mar Argentino se ha utilizado la ‘sísmica’ como técnica exploratoria. En las costas bonaerenses, por caso, se han registrado desde 1960 unos 50.000 kilómetros de sísmica y se perforaron 18 pozos; algunos de ellos relativamente cercanos a la costa. ¿Ocurrió algún desastre ecológico? La respuesta es un rotundo no”, expresaron. En tanto, apuntaron que “decir que las operaciones se harán en las costas bonaerenses es relativo y hasta tendencioso”. Y afirmaron: “El punto más cercano a Mar del Plata, de hecho, son 307 kilómetros, tan lejos de la localidad balnearia como Brandsen, por ejemplo. Nadie en Mar del Plata verá plataformas ni petróleo“.
Por otra parte, se refirieron al cuidado de la fauna y aseguraron que “las poblaciones de ballenas no han dejado de crecer en los últimos 50 años”. “Y hay que decir que se salvaron de una casi segura extinción, cuando las ciudades comenzaron a iluminarse con querosene (derivado del petróleo), en lugar de aceite de ballena”, sumaron.
Asimismo, aseveraron que “la actividad pesquera enfrenta problemas propios relacionados con la presión sobre el recurso” y remarcaron que “nada tiene que ver la actividad hidrocarburífera”. Y añadieron: “Países que son potencias pesqueras, como Noruega, tienen desarrollos intensivos de gas y petróleo en el mar”.
En este marco, consideraron que “existe una embestida sin precedentes en contra de los hidrocarburos, que hoy representan la mitad del consumo mundial de energía”. En esa línea, subrayaron que “la creencia de que las llamadas ‘energías limpias’ son la solución al problema es un mito, divulgado en forma irresponsable”.
“No es cierto que en el corto plazo puedan ser reemplazados con energías renovables. Y la demanda energética va en aumento”, advirtieron y expusieron que “hoy no existe prácticamente ningún país en el mundo cuya matriz energética no tenga un mínimo de 70% de combustibles fósiles”. En esa línea, destacaron: “Estas fuentes son valiosos complementos, pero con serias limitantes técnicas e impactos ambientales de los que no se habla”.
Al mismo tiempo, soslayaron: “Los países más proteccionistas del mundo (Canadá, Australia, Holanda, Noruega, etc.) tienen actividad offshore por los beneficios que reporta. Y no prohíben: regulan. En Noruega, por ejemplo, la actividad convive con la pesca el turismo y la vida marina desde los años 60”.
Por último, desde el IAPG aseguraron que “los beneficios de la actividad impactarán positivamente y de lleno en la economía del país y, en especial, de una ciudad como Mar del Plata, ya que de producirse un hallazgo, incontables actividades entre bienes y servicios se pondrán en marcha”. Y concluyeron: “No dejes que te asusten con imágenes tremendistas y consignas chatarra. Los permisos para explorar el Mar Argentino son una muy buena noticia. Tenemos que conocer nuestros recursos, si queremos defenderlos y aprovecharlos. Y si producto de esa exploración se produce un hallazgo, la noticia será buena multiplicada a la enésima para el país y, en especial, para Mar del Plata”.