El ministro de Economía, Sergio Massa, visitó hoy la sede de la Unión Europea en la Argentina y dialogó con los 21 embajadores comunitarios sobre los medios para incrementar el comercio con esa región, las inversiones directas y dar a conocer la hoja de ruta del país para los próximos meses.
Massa destacó a la UE como un socio preponderante en el plan de crecimiento de la Argentina ya que ese bloque es un mercado clave para las exportaciones nacionales, con US$ 11.000 millones en 2022.
Además, el bloque es el principal inversor en el país en sectores muy diversos como manufacturas, servicios, minería, tecnologías de la información y las comunicaciones e hidrocarburos, entre otros, informó el Palacio de Hacienda a través de un comunicado.
Junto al jefe de la Delegación de la UE en Argentina, Amador Sánchez Rico, participaron los embajadores de Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Rep. Checa, Croacia, Dinamarca, Eslovaquia, Eslovenia, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Irlanda, Italia, Países Bajos, Polonia, Portugal, Rumania y Suecia.
Por su parte, Massa asistió acompañado de su asesor principal en relaciones internacionales, Gustavo Martínez Pandiani.
En este marco, Massa y los representantes de las naciones de la UE, coincidieron en la necesidad de buscar más espacios de cooperación para alentar modelos de desarrollo conjunto que tengan en cuenta el cuidado del medio ambiente, al tiempo que promuevan el fortalecimiento de cadenas de valor y la generación de empleo.
Asimismo, el ministro hizo saber a los representantes diplomáticos que la Argentina está en condiciones de consolidarse como un actor preponderante en el escenario mundial como proveedor de energía de transición (gas natural) y verde, minerales críticos como litio y cobre.
En tanto que aseguró que las proyecciones del sector agroindustrial, más allá de la sequía que afectó al país en 2023, son por demás favorable gracias al aumento de la superficie cultivable y el desarrollo de agro-tech.
A su vez, mantuvieron un fluido intercambio sobre cuestiones vinculadas a la agenda geopolítica internacional, haciendo foco en la guerra en Ucrania, su impacto en las cadenas de suministros y sobre los precios globales.
Sobre este punto, Massa instó a los países europeos a redoblar los esfuerzos de cooperación birregional y llamó a repensar el funcionamiento de los organismos multilaterales de modo de dotarlos de mayores herramientas para proteger a las naciones de la inestabilidad económica y financiera global.
Respecto al acuerdo Mercosur-UE coincidieron que se trata de un mecanismo estratégico para potenciar los vínculos birregionales y reconocieron la necesidad de aumentar los esfuerzos para lograr un acuerdo equilibrado que sea mutuamente beneficioso para el desarrollo de ciudadanos de ambos lados del atlántico.