La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, anticipó hoy que las tasas de interés de la entidad continuarán subiendo hasta a un nivel restrictivo para el crecimiento económico, con el objetivo de frenar una inflación que ha alcanzado un récord de 10,6% anual en la Eurozona en octubre, más que quintuplicando la meta del banco de un 2% anual.
Tras años manteniendo las tasas en negativo con el objetivo de impulsar la economía, el BCE dispuso ya tres incrementos este año (uno de 50 puntos básicos y dos de 75 puntos), llevándola a 1,5%, un nivel que no se veía desde 2009, previo a la crisis de bonos soberanos del bloque.
La velocidad en la que el BCE ha aumentado sus tasas representa el mayor endurecimiento en su política monetaria de su historia.
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El mercado prevé que la entidad europea aumentará sus tasas en diciembre en 50 puntos, llevándolas al 2%, según las agencias de noticias Bloomberg y DPA.
De esta forma, se evitaría otra suba de 75 puntos frente al temor a un retroceso en la economía de los 19 países que utilizan el euro durante el próximo invierno boreal.
En ese sentido, además de anticipar nuevas subas en el costo del dinero, Lagarde advirtió que ha aumentado el riesgo de una recesión y que, incluso si ello sucediera, no sería suficiente para calmar a los precios.
Es por ello que, para la presidenta del BCE, resulta vital la política monetaria para anclar las expectativas inflacionarias.
Esperamos seguir aumentando las tasas. En última instancia, las aumentaremos a niveles que permitan bajar la inflación a nuestras metas de mediano plazo, dijo Lagarde en un discurso en Frankfurt, Alemania.
Según señaló esta semana el vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, la inflación en la Eurozona continuará elevada en los meses venideros y en la misma línea que Lagarde- señaló que la desaceleración económica, impulsada por la crisis energética, no hará mermar los precios por si sola.
La inflación en la Eurozona es demasiado alta. La experiencia histórica sugiere que una recesión es poco probable que haga bajar la inflación significativamente, al menos en el corto plazo, precisó hoy Lagarde, quién, a su vez, señaló que en diciembre el banco dará mayores presiones sobre la reducción en su hoja de balances que llevará a cabo durante el año próximo.
De cara al largo plazo, la francesa, extitular del Fondo Monetario Internacional (FMI), afirmó que la política fiscal será clave para estimular o no el crecimiento, y que los gobiernos deberán elegir entre aumentar impuestos o recortar la inversión pública.
"Si optan por este último método, como hicieron después de la gran crisis financiera, existe el riesgo de que la oferta no se recupere y las restricciones al crecimiento sigan limitando", sostuvo la presidenta del BCE.
Con información de Télam