La Reserva Federal de los Estados Unidos (Fed) resolvió hoy en Washington elevar su tasa de interés de referencia en 25 puntos básicos y la fijó en un rango de entre 5% y 5,25%, al tiempo que admitió que aún "la inflación es elevada".
Tras la reunión del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés), la Fed señaló que "la actividad económica se expandió a un ritmo moderado en el primer trimestre; la creación de puestos de trabajo ha sido sólida en los últimos meses y la tasa de desempleo se ha mantenido baja; la inflación sigue elevada".
Respecto de la reciente crisis bancaria, puntualizó que "el sistema bancario estadounidense es sólido y resistente; es probable que las condiciones crediticias más estrictas para los hogares y las empresas pesen sobre la actividad económica, la contratación y la inflación".
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"El alcance de estos efectos sigue siendo incierto; el Comité permanece muy atento a los riesgos de inflación", completó.
Más adelante, el comunicado reitera que "el Comité busca lograr el máximo empleo e inflación a una tasa de 2% a largo plazo; en apoyo de estos objetivos, el Comité decidió elevar el rango objetivo para la tasa de fondos federales de 5 a 5-1/4 por ciento".
La Fed enfatizó que para ello "el Comité tendrá en cuenta el endurecimiento acumulativo de la política monetaria, los rezagos con los que la política monetaria afecta la actividad económica y la inflación, y los factores económicos y financieros".
El directorio votó de manera unánime y, respecto de alguna modificación de su postura actual, el organismo reveló que "el Comité estaría preparado para ajustar la postura de la política monetaria según corresponda si surgen riesgos que podrían impedir el logro de los objetivos del Comité".
"Las evaluaciones del Comité tendrán en cuenta una amplia gama de información, incluidas las lecturas sobre las condiciones del mercado laboral, las presiones inflacionarias y las expectativas de inflación, y la evolución financiera e internacional", indicó.
En una conferencia de prensa posterior, el presidente de la Fed, Jerome Powell, sostuvo que "si los miembros de la Reserva Federal están en lo correcto, puede tomar algún tiempo para que los recortes de tasas parezcan plausibles".
Según Powell, "en el comité tenemos la opinión de que la inflación va a bajar no tan rápido; tomará algún tiempo, y en ese mundo, si ese pronóstico es correcto en términos generales, no sería apropiado reducir las tasas y no lo haremos".
Para el funcionario, "es probable que la demanda y las condiciones del mercado laboral deban debilitarse un poco más para ver progresos en los servicios que no son de vivienda y considerar que los recortes de tasas son apropiados".
En relación con el empleo, Powell destacó que "los signos iniciales de debilidad en el mercado laboral sugieren que el camino hacia un aterrizaje suave para la economía estadounidense no está descartado".
El presidente de la Fed advirtió la posibilidad de "seguir teniendo un enfriamiento en el mercado laboral sin los grandes aumentos en el desempleo que han ocurrido con muchos episodios anteriores".
Powell remarcó que "los aumentos salariales se han ido reduciendo y eso es una buena señal; a niveles más sostenibles; creo que el caso de evitar una recesión es, en mi opinión, más probable que el de tener una recesión".
En relación con la crisis bancaria, Powell dijo que la corrida en Silicon Valley Bank no tenía "precedentes históricos" y que "los reguladores deberán abordarla en el futuro".
Powell, calificó la adquisición del First Republic Bank por parte de J.P. Morgan como una "excepción".
"Creo que probablemente sea una buena política que no queramos que los bancos más grandes hagan grandes adquisiciones; esa es la política, pero esta es una excepción para un banco en quiebra y creo que en realidad es un buen resultado para el sistema bancario", concluyó el funcionario.
Con información de Télam