El sector de la ciencia y la tecnología en nuestro país viene siendo golpeando por el desfinanciamiento de partidas, el congelamiento de proyectos de investigación, recortes en diversas áreas y organizamos, cierre de becas y despidos. A esto, que configura el duro escenario que enfrentan también las universidades nacionales que vuelven a parar esta semana, se suma el deterioro salarial de las y los investigadores que en solo cinco meses de la actual gestión nacional perdieron casi 30 puntos de sus ingresos, y algunos apenas alcanzan a cubrir el 50% del poder de compra que tenían en diciembre de 2015.
Así, científicos, técnicos, personal de apoyo y becarios del CONICET, universidades nacionales y del Estado Nacional enfrentan, mes a mes, la caída sostenida de sus ingresos que agudiza la pendiente a la baja de los últimos años. “Tomando como base noviembre de 2023 (último mes liquidado por la anterior gestión), el escalafón del sistema público ha perdido, considerando la inflación, 15,8%, los investigadores de CONICET un 26,1% y los de universidades nacionales un 28,5%”, indicó un informe privado que puso sobre la mesa los números concretos del deterioro salarial y condiciones de vida de dichos trabajadores.
MÁS INFO
Este proyecto lo hacemos colectivamente. Sostené a El Destape con un click acá. Sigamos haciendo historia.
Las proyecciones para el resto del año, por su parte, no son prometedoras si se considera que “si bien el Relevamiento de Expectativas de Mercado del BCRA continúa descendiendo el horizonte de expectativas de inflación, es a costa del agravamiento de las perspectivas respecto del nivel de actividad, el cual se sitúa en una franca depresión económica de proporciones solo comparables a la pandemia en 2020”, agregaron.
Salarios en caída libre
Las y los trabajadores del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (SNCTI) que vienen sufriendo, desde hace ocho años, la pérdida sostenida del poder adquisitivo de sus ingresos, vieron ahora como en solo cinco meses de 2024 se licuaban aún más sus salarios. Si se mira a largo plazo se observan igualmente algunas diferencias en el derrotero de 2015 a la fecha: mientras los salarios en universidades nacionales cayeron 10,4% en el período 2015-2019, el promedio anual del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) y el empleo público, mostró una pérdida que escaló entre 25% y 27% en ese tiempo. Luego, de 2019-2023, comenzó una recuperación para CONICET, aunque no para los investigadores del Sistema Nacional de Empleo Público (SINEP), así para fines del año pasado los profesionales de universidades nacionales y CONICET cerraron entre 9 y 12 puntos por debajo de 2015, a la vez que el SINEP se contrajo 40 puntos, en el promedio anual.
Los datos se desprenden del último informe presentado por el Centro Iberoamericano de Investigación en Ciencia, Tecnología e Innovación (CIICTI) que releva la evolución de la actividad, el presupuesto y los salarios del sector y alertó que ese panorama de deterioro salarial se agravó en 2024 cuando “por primera vez los tres grupos descienden en simultáneo, de manera vertical”.
MÁS INFO
En detalle, en solo cinco meses los salarios en el CONICET cayeron 26,1% y volvieron a ubicarse en niveles de agosto del 2021. Puntualmente en abril, sufrieron una contracción del 8,1% frente a una inflación del 8,8%. En relación, las remuneraciones de la Comisión de investigaciones científicas (CIC) y la Carrera del Personal de Apoyo a la Investigación y Desarrollo (CPA) del CONICET, así como también los estipendios, no tuvieron variaciones nominales en el cuarto mes del año, contrarrestando los efectos de las últimas cuatro jerarquizaciones del organismo. “La política hacia el sector parece bastante definida en su orientación a alcanzar antes del tercer trimestre, el nivel salarial de 2019”, analizaron los especialistas del CIICTI y agregaron que “desde mayo de 2021 no se alcanzaba un nivel de ingresos tan bajo” debido “al ajuste ejecutando en pocos meses para revertir el signo de los avances del período anterior”.
En el caso de las y los investigadores de universidades nacionales, registraron al momento la mayor pérdida, alcanzando una retracción del 28,5% en los primeros meses de la gestión libertaria. Respecto de abril, los salarios universitarios tuvieron un aumento nominal del 8%, por lo que descendieron en términos reales un 0,76%. “Mientras en los cuatro años precedentes los ingresos se habían mantenido en la cota en la que los había dejado el gobierno de Macri, con una ligera variación al alza, en los últimos cinco meses se asiste a una pérdida que convalida una caída sustantiva, permaneciendo con ello 35,9 puntos reales por debajo de diciembre de 2015”, explicó el centro de estudios.
Por su parte, en cuanto a quienes son parte del Sistema Nacional de Empleo Público (trabajadores de los diversos Organismos Científicos y Tecnológicos), se observó una caída salarial desde noviembre pasado que trepó al 15,8%. En abril tampoco tuvieron alzas nominales y cayeron 8,11%. Así, “los salarios estatales, que habían perdido 32,4% durante el gobierno de Macri, y prolongaron su caída en 10,4% durante el gobierno de Fernández, se encuentran ahora en un mínimo histórico”, alertó el informe que mostró que apenas alcanzan a cubrir el 51% del poder de compra que tenían en diciembre de 2015, esto es, los salarios de los empleados públicos se han reducido a la mitad en poco más de ocho años.
Recortes presupuestarios
En el informe realizado por el Centro Iberoamericano impulsado por la Universidad Nacional de La Plata y la Universidad Nacional de San Martín, se analizó también la ejecución presupuestaria de este año y se detalló que la gran mayoría de los organismos “han devengado ya más del 60% del crédito para gasto en personal, cuando teniendo en cuenta la pauta salarial y la evolución de la inflación esperada, el gasto en los primeros cuatro meses no debería representar más del 23% del total anual”. Sobre esto valoraron que “el gasto marcha a un ritmo inconsistente con el crédito vigente otorgado, habiendo ejecutado casi el 55% de su presupuesto disponible en tan solo cuatro meses. Ese porcentaje sería aún mayor de no haberse visto incidido por el 0% ejecutado al 30 de abril por la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología”.
A la vez, comparado con 2023, “el porcentaje del gasto en personal como proporción del total se incrementa notablemente, pasando del 54,8% al 70,4% y esto quiere decir que aun cuando los salarios reales caen, los otros ítems de gasto caen más rápido todavía, lo que permite que unos salarios menguantes constituyan una fracción creciente de un total aún más declinante”.
En lo concreto, la caída es notoria en Transferencias, que pasa del 19,4% al 8,5%, “principalmente por la desaparición de la inversión en los programas federales Construir Ciencia y Equipar Ciencia y el congelamiento de las transferencias a las UUNN”. También cae en 54,4% real la inversión en bienes de uso y de consumo (insumos críticos y materiales requeridos para el desarrollo de I+D) lo que “muestra la dramática situación en cuanto a la capacidad de llevar adelante las actividades científicas y tecnológicas en nuestro país”.