El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) inició en la ciudad rionegrina de Cinco Saltos un plan de emergencia fitosanitaria tras la detección de ejemplares adultos de mosca de los frutos -Ceratitis capitata Wied- en la zona urbana de la citada localidad.
Actualmente los valles productivos de la región patagónica están reconocidos como Área Libre de Mosca de los frutos y “la detección de estos ejemplares no implica perder esa condición fitosanitaria”, enfatizaron desde la dependencia sanitaria.
Las acciones para el control del brote contemplan el establecimiento de un área reglamentada comprendida por un círculo de 7,2 kilómetros de radio con eje en el sitio en el que se detectó la plaga.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Tras esta detección, queda prohibida la exportación de frutos originarios del área regulada hacia mercados con restricciones sin el correspondiente tratamiento cuarentenario
Al respecto el director nacional de Protección Vegetal del Senasa, Diego Quiroga, señaló que “rápidamente delimitamos el regulada de 7,2 km de radio donde se intensifica el trampeo, que es la manera de monitorear para que no haya más detecciones, buscando que la plaga no se disperse más allá de esta zona cuarentenada, dando la seguridad a los países a los que les exportamos”.
“Lo importante que vale destacar, es que no se pierde el estatus de área libre que tiene en este caso la Patagonia reconocida por países como EEUU China y Chile”, remarcó Quiroga.
El funcionario del Senasa dijo que este tipo de casos se está dando en muchos países “debido al impacto del clima, no ocurre solo en Argentina sino que también ocurre en otros países productores de fruta”.
“Ahora debemos trabajar fuertemente con la provincias de la región patagónica y con los productores para erradicar el brote como ya lo hemos hecho en otras oportunidades”, finalizó Quiroga.
Entre las medidas establecidas se incluye la intensificación de las acciones de vigilancia, a través de la instalación de dispositivos de trampeo y el muestreo de frutos.
Además de la recolección y destrucción de los frutos hospedantes de la plaga, la remoción del suelo bajo la proyección de la copa de los árboles, la inmovilización de la fruta del área reglamentada, la realización de tratamientos fitosanitarios en caso de ser necesario.
Con información de Télam
Cerrar sesión