Los dirigentes de la Unión Europea están dispuestos a impulsar medidas para proteger a los consumidores de los precios récord de la energía, que han reducido la producción industrial y aumentado las facturas de los consumidores.
Los líderes de la UE se reunirán los días 21 y 22 de octubre para debatir la subida de los precios de la energía y una "caja de herramientas" que la Comisión Europea ha publicado esta semana y que confirma las medidas que los Gobiernos nacionales pueden utilizar para proporcionar un alivio inmediato a los consumidores.
Un borrador de las conclusiones de los líderes, visto por Reuters, invita a la Comisión y a los países de la UE a utilizar esas herramientas "para proporcionar un alivio a corto plazo a los consumidores más vulnerables y apoyar a las empresas europeas".
Hasta el miércoles, veinte países de la UE habían elaborado este tipo de medidas, que incluyen topes de precios, recortes de los impuestos sobre la energía y subvenciones para los hogares más pobres.
Este número va a aumentar, ya que Alemania tiene previsto recortar el recargo en las facturas de energía de los consumidores que ayuda a financiar las inversiones en energías renovables.
La Comisión dijo que también evaluaría las medidas que la UE podría adoptar a largo plazo para proteger a los países contra las subidas de precios, incluida la compra conjunta de gas.
Los líderes de la UE pedirán a la Comisión que "estudie medidas a medio y largo plazo que mitiguen las fluctuaciones excesivas de los precios, aumenten la resistencia energética de la UE y garanticen el éxito de la transición ecológica", según el proyecto de conclusiones.
Los ministros de la UE "impulsarán este trabajo de inmediato" en una reunión de urgencia sobre los precios de la energía que se celebrará el 26 de octubre, según el proyecto, que podría cambiar antes de ser adoptado por los líderes.
Los líderes también pedirán al Banco Europeo de Inversiones, que es propiedad de los Gobiernos de la UE, que "examine su margen de capital para acelerar la inversión en la transición verde, con vistas a reducir futuros riesgos de interrupción".
Bruselas ha dicho que un cambio más rápido hacia la energía verde es la mejor defensa contra futuros picos de precios, ya que reduciría la exposición al volátil precio de los combustibles fósiles importados.
Con información de Reuters