El espiral inflacionario no se detiene y mayo promete ser otro mes en el que los precios de la economía se incrementen de forma preocupante. Con foco en alimentos, el impacto sobre los bolsillos de los sectores populares podría profundizarse tras darse a conocer los datos inflacionarios en el rubro mayorista. En un dato que refleja la crisis de precios que atraviesa el país, la inflación mayorista de abril rozó el 6% y preocupa el efecto cascada que puede generar en la minorista.
En lo que va del año, el costo de los productos comercializados en cadenas mayoristas se aceleró por encima del 20%. Cabe destacar que la suba del mes fue la segunda más alta de la serie de Indec en los últimos dos años y medio. Según el último informe del Indec, el nivel general del Índice de Precios Internos al por Mayor (IPIM) registró un aumento de 5,9% en abril respecto del mes anterior. En el primer cuatrimestre del año, el incremento acumulado es del 22,3%. En los últimos 12 meses, los precios que componen este segmento subieron 51,9%.
Usualmente, el dato del mes sobre inflación mayorista anticipa los niveles posteriores que se registran en el segmento minorista. Por ejemplo, la inflación mayorista de febrero fue de casi el 5% y la minorista de marzo fue del 6,7%. En lo que va del año, el incremento general de precios fue del 23,1% y el rubro de alimentos y bebidas escaló 28% en el mismo periodo. De seguir la dinámica alcista, las proyecciones indican que el piso de aumento de mayo se ubica en el 5%.
Los alimentos no paran de subir y los salarios corren detrás
Según el informe efectuado en supermercados y negocios barriales de la ciudad de Buenos Aires por la organización Consumidores Libres, el precio de los 21 productos de la Canasta Básica de Alimentos tuvo un aumento del 2,4% durante la primera quincena de mayo. En ese sentido, de acuerdo a un informe de la consultora LCG al que pudo acceder El Destape, la segunda semana de mayo viene de marcar una suba de precios de los alimentos que promedió 2,05%.
Canasta básica inaccesible
Según informó el Indec, una familia tipo necesitó en abril un ingreso mensual de $ 95.260 para no ser considerada pobre. Para no ser indigente, el mismo grupo familiar precisó más de $ 40.000
Según las estadísticas, el costo de la Canasta Básica Total (CBT), aumentó 6,2% respecto a marzo. Al mismo tiempo, una familia integrada por cuatro personas necesitó un total de $ 42.527, debido a que el costo de la Canasta Básica Alimentaria (CBA), cifra necesaria para no ser considerado indigente, aumentó un 4,2%.
En lo que va del año, la canasta alimentaria se aceleró un 29%, mientras que la canasta total aumentó 25,1%. Por otra parte, teniendo en cuenta las cifras oficiales, una familia de cinco integrantes requirió en abril un ingreso de $ 100.193 para no encontrarse en situación de pobreza. Para un grupo familiar de tres miembros, los ingresos debieron llegar en el mismo mes a $ 75.838.
Comparando los parámetros actuales, el salario mínimo se ubica en poco más de $ 38.000, una cifra inferior a la canasta de indigencia definida para cuatro personas. Aunque está estipulado que a partir de junio la remuneración mínima será de $ 45.540, la cifra se ubicará cercana al monto que representará la CBA en los meses de mayo y junio.