El presidente Alberto Fernández participó de la apertura del congreso anual de La Bancaria con un contundente apoyo al líder del gremio, Sergio Palazzo, y el aval con su propia firma de un nuevo acuerdo tras la reapertura de las paritarias 2021 por un aumento salarial del 45%. Ese número ya representa la nueva pauta de discusión entre sindicatos y empresarios.
Otra vez los bancarios son elegidos por el presidente como paritaria testigo para todos los sectores. El de Palazzo fue el gremio que firmó el primer acuerdo salarial del año, en febrero, cuando cerró un 29 por ciento, el porcentaje que sugerían en aquel momento desde el Ejecutivo. Al día siguiente de la firma con las cámaras empresariales, Alberto Fernández recibió en Olivos al líder de La Bancaria.
El presidente fue este miércoles hasta la sede del sindicato y suscribió el acta, acompañado por el gobernador bonaerense, Axel Kicillof. “Pude firmar el acuerdo paritario entre los banqueros y los bancarios. Me preocupa mucho que los trabajadores tengan más derechos. Lo que más me importa es que el sueldo no se retrase respecto de la inflación y que le gane, porque ya se atrasaron muchos años”, dijo Alberto Fernández en el acto.
Es el impulso oficial que esperaban otros gremios para reclamar que se reabran las negociaciones que quedaron relegadas por la inflación. En esa línea se anotan ahora en Comercio, que cerró un 32% en abril, el sector de la construcción, que había acordado un 36%, y la Unión Obrera Metalúrgica, que firmó por 35,2%.
Este martes, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) que conduce Hugo “Cachorro” Godoy pidió adelantar la revisión -prevista para noviembre- del acuerdo alcanzado hace un mes, en mayo, con un alza cercana al 35%.
Los primeros en lograr una revisión fueron los encargados de edificios, el gremio de SUTERH que conduce Víctor Santamaría, al acordar una suba del 32% al 44,8%.
Los Camioneros, liderados Pablo y Hugo Moyano, ya habían logrado un acuerdo salarial del 45% de aumento en tres tramos, firmado el viernes último, un número que los dirigentes calificaron de “histórico”. También la Unión del Personal de la Seguridad Privada anunció una suba de 45,4%.
La discusión más complicada por estas horas es la de Alimentación. Las empresas se mantienen firmes en la oferta del 32% y desde el gremio, que conduce Rodolfo Daer, rechazan la propuesta y anticipan medidas de fuerza por la “actitud mezquina” de las alimenticias. El 29 de junio vence la conciliación obligatoria dictada por el ministerio de Trabajo.
Por otra parte, el cosecretario general de la CGT, Héctor Daer, afirmó esta semana que la negociación paritaria que lleva adelante como líder de Sanidad podría acordarse entre un 43% y 45% de aumento. El conductor de la central obrera dejó en claro que "ya no existe el escenario del principio, cuando se planteó que iba a ser un 29% el punto de llegada a lo largo del año y que a partir de ahí se iba a recuperar el salario".
Con las elecciones legislativas ya en el horizonte, a un mes del cierre de listas, en el oficialismo redoblan esfuerzos para que no se desborden las tensiones. En el gobierno nacional ratifican, cada vez que tienen la oportunidad, que el objetivo y la voluntad política es que en este año los salarios le ganen a la inflación.
El ministro de Economía, Martín Guzmán, dijo anoche que “las paritarias nunca tuvieron techo”. Explicó que “hay una readaptación que apunta al objetivo de que crezca el salario por encima de la inflación, y no un poquito sino de forma significativa”, agregó.
En el sector público ya había quedado en el olvido la proyección inflacionaria de Guzmán. En primer lugar, Cristina Fernández y Sergio Massa acordaron con los trabajadores estatales del Congreso un aumento del 46%; en ANSES, a cargo de Fernanda Raverta, pautaron una suba anual de 45,5%; y en el PAMI, Luana Volnovich firmó un 43% más un bono de 20 mil pesos.
Además, la Comisión Nacional de Trabajo en Casas particulares estableció, mediante el Ministerio de Trabajo, una recomposición del 42% en cuatro cuotas más un histórico reconocimiento por antigüedad.
La vicejefa de Gabinete y economista, Cecilia Todesca Bocco, afirmó esta semana en El Destape Radio que las paritarias se irán reabriendo si el índice de inflación es "mayor al previsto", porque el objetivo es que los salarios no pierdan poder adquisitivo.
“Esas mismas paritarias tienen cláusulas de reapertura si los salarios quedan por debajo de la inflación y nosotros estamos de acuerdo con esa hipótesis. Si la inflación es mayor a la que nosotros pensamos, entonces las paritarias se tienen que ir reabriendo para dar lugar al reacomodamiento de los salarios para que los trabajadores no pierdan en términos reales”, explicó.
La funcionaria sostuvo que "durante el Gobierno de Macri los salarios de los trabajadores registrados públicos y privados perdieron 17 puntos; ni bien nosotros asumimos, esos mismos salarios habían subido 6,4% en términos reales".