La AFIP detectó varias irregularidades en las exportaciones de carbonato de litio que afectan los ingresos fiscales y la correcta liquidación de divisas. En ese sentido, para desarticular ese tipo de maniobras la Dirección General de Aduanas estableció valores de referencia para las exportaciones de carbonato de litio. El precio testigo fijado es de 53 dólares el kilogramo. Los valores serán publicados este martes en el Boletín Oficial.
Según pudo saber El Destape de fuentes oficiales, la medida es el resultado del trabajo articulado con las áreas especializadas de fiscalización internacional de la AFIP "para desarticular irregularidades en las exportaciones de carbonato de litio que afectan los ingresos fiscales y la correcta liquidación de divisas".
La medida recibió el apoyo de las provincias del norte del país, donde se desarrollan proyectos de explotación de carbonato litio, dado que permite "transparentar las operaciones del sector ya que sus regalías están determinadas por el precio que declaran las empresas".
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"La AFIP y la DGA avanzan en paralelo con distintas investigaciones sobre las maniobras abusivas detectadas a lo largo de los últimos dos años", señalan desde esas dependencias. La dimensión de los desvíos detectados permite anticipar que esos procedimientos darán lugar a cargos millonarios por la falta de pago de derechos de exportación y por abusos en operaciones internacionales entre empresas de sus mismos grupos económicos.
Argentina es uno de los principales productores de carbonato de litio en el mundo, un insumo clave para la elaboración de baterías en el marco de la transición hacia la electromovilidad. La cadena exporta la totalidad de su producción. En 2021, los envíos al exterior superaron las 27.000 toneladas por 185 millones de dólares. Se trata de un recurso estratégico para distintas industrias pero, aunque se trata de un commodity como la soja o el oro, no existe un precio internacional.
Cuáles son las irregularidades
A diferencia de otros productos mineros, los compuestos de litio no son comercializados a través de la Bolsa de Metales de Londres sino mediante contratos confidenciales donde los precios varían, por ejemplo, de acuerdo con la especificidad técnica del producto, el volumen y los plazos de venta. Los precios de referencia son estimados por empresas especializadas, en base a contactos individuales con participantes involucrados en la compraventa del recurso.
"Las irregularidades asociadas a la opacidad de precios investigadas por la AFIP y la Aduana también comenzaron a ser señaladas este año desde los gobiernos de provincias como Catamarca", explicaron a este medio las fuentes oficiales. Desde la AFIP entienden que la fijación del nuevo valor de referencia para las exportaciones de carbonato de litio y las investigaciones en marcha permiten comenzar a transparentar las distintas irregularidades detectadas.
La resolución que lleva la firma de la titular de la Aduana, Silvia Traverso, se publicará en el Boletín Oficial este martes pero el Gobierno le anticipó la decisión el viernes a las autoridades de Salta, Catamarca y Jujuy. "Las regalías de las provincias del norte están determinadas por los precios informados por las empresas exportadoras que, como muestran las investigaciones de la AFIP y la DGA, daban lugar a maniobras abusivas", según los considerandos de la norma a publicar.
El precio testigo fijado por la Aduana es de 53 dólares el kilogramo de carbonato de litio para las exportaciones de este producto que tengan como destino Canadá, Estados Unidos, Hong Kong, Corea del Sur, China, Filipinas, Japón, Taiwán y Tailandia.
La medida no solo aborda la problemática del litio sino que forma parte del proceso de restablecimiento de las herramientas de control del comercio exterior desmanteladas durante el gobierno macrista. Desde 2020 se establecieron valores de referencia para más de 20 complejos exportadores. La herramienta fortalece la capacidad estatal de fiscalización del comercio exterior y evita maniobras de subfacturación en las ventas al exterior. Carne bovina, leche en polvo, limones, cueros, manzanas y langostinos son algunas de las mercaderías sobre las que la Aduana definió precios testigo para evitar maniobras abusivas que se traducen en evasión de impuestos y que afectan el ingreso de divisas al mercado cambiario.
Los valores referenciales ofrecen un primer control de las declaraciones en resguardo del interés fiscal y permiten detectar desvíos respecto de los valores usuales para mercaderías idénticas o similares. De esta forma son una herramienta fundamental para identificar y desarticular maniobras abusivas en el comercio exterior.