En conferencia de prensa, el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, confirmó la creación del Fondo Estabilizador del Trigo Argentino para reducir el precio a los valores de febrero y anunció créditos para que los molinos aceleren la producción de harina. Luego de una tensa reunión con los empresarios de las grandes cadenas alimenticias, envió un mensaje terminante al sector: "De ninguna manera vamos a convalidar que se juegue con la mesa de los argentinos".
El funcionario afirmó que se lanzará una “línea de créditos por $8.000 millones a tasa subsidiada para la industria molinera” con el objetivo de que los molinos aceleren la compra de trigo para producir harina pero eviten “un traslado masivo de precios a la mesa de los argentinos”. Así lo manifestó en una conferencia de prensa en la sede del ministerio, donde anunció distintas medidas para contener la inflación, fundamentalmente en lo que hace a los precios de los alimentos. Además, confirmó que este miércoles, el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, brindará anuncios sobre precios en comercios de cercanía.
"En febrero, vimos un aumento del precio internacional del trigo, la tonelada interna se incrementó por encima de los $ 35.000. Si no hay medidas, hay pan, harina y fideos más caros, y todo encarece el acceso a la alimentación. Se definió crear un fideicomiso para llevar los precios al mes de febrero", sintetizó el ministro. La finalidad será estabilizar el precio del cereal en niveles prebélicos, al mismo tiempo que fijó un nuevo esquema de derechos de exportación para subproductos de la soja para poder financiarlo.
La financiación del Fondo se obtendrá a partir de lo recaudado tras la quita del diferencial en los derechos de exportación que tributaban los productos industrializados de soja respecto al poroto. Así, el Poder Ejecutivo suspendió de manera temporal dicho beneficio para la industria, por lo cual tanto la harina como el aceite de soja, los dos principales productos de exportación del complejo sojero argentino, pasarán a tributar dos puntos más hasta alcanzar el 33%, equiparándose con la alícuota que paga el poroto.
Tensión con empresarios
Asimismo, Kulfas sostuvo que la reunión con las autoridades de la Asociación de Supermercados Unidos (ASU) y la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (Copal) se dio en un clima "tenso". Según informó, el Gobierno le dio 24 horas a los empresarios para que definan un marco de explicación sobre las brutales subas que deben afrontar los consumidores de la canasta básica de alimentos".
"Veníamos viendo en las ultimas semanas listas de precios con aumentos inesperados, fuera de proporción, con procesos especulativos. Fue uan reunión constructiva, le planteamos ejemplos concretos, tuvo momentos de tensión porque había negación de los aumentos, los sectores no se hacían cargo de estas subas", disparó Kulfas. Y agregó: "Luego de un intercambio intenso, dimos 24 horas para que se definan cuáles son los responsables de estos aumentos".
Finalmente, sentenció: "Como se dice la patria es el otro, acá se plantea que el remarcador es el otro. La culpa o es de la industria, o del fraccionador, del distribuidor, del pequeño supermercado. De ninguna manera vamos a convalidar que se juegue con la mesa de los argentinos".