El 90% de las empresas cumplió con el congelamiento de precios

La excepción en ese nivel de cumplimiento en la provisión de mercaderías es el aceite de girasol, que registra un abastecimiento en las góndolas del orden del 55%.

29 de noviembre, 2021 | 16.42

La resolución gubernamental que congeló los precios de productos de consumo hasta el próximo 7 de enero logró un cumplimiento del 90% en relación con valores fijados y del 80% con respecto al abastecimiento, de acuerdo con un relevamiento de la Secretaría de Comercio Interior en 200 puntos de venta. La excepción en ese nivel de cumplimiento en la provisión de mercaderías es el aceite de girasol, que registra un abastecimiento en las góndolas del orden del 55%.

Según los números recabados por la dependencia oficial, la canasta que fijó Comercio Interior se cumplió en un 90% en lo que respecto a los precios y en un 80% en cuanto al abastecimiento en las grandes cadenas del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y del interior del país. Hubo un caso, el del mayorista Maxiconsumo, donde se registró un cumplimiento del 74% en los precios.

En el caso del interior del país, el cumplimiento de las cadenas regionales se encuentra en el 75% en promedio para precios y abastecimiento. Asimismo, el abastecimiento de aceite de girasol registró un 55% de cumplimiento, lo cual llevó a Comercio Interior a convocar a las compañías aceiteras para analizar la situación.

En el encuentro llevado a cabo la semana pasada, se abordó también la cuestión del fideicomiso del sector que vence el 31 de enero. En ese sentido, las aceiteras se comprometieron a aumentar en U$S 28 millones el fideicomiso que actualmente es de U$S 190 millones y se está agotando, con lo cual pasaría a ser de U$S 218 millones.

El fideicomiso es una herramienta a través de la cual el Gobierno buscó desacoplar los precios internacionales de los commodities a los valores que paga el consumidor, e implica que los exportadores subsidian a los productores otorgándoles una compensación por la diferencia entre el precio de exportación y el del mercado interno. Si bien en este punto llegaron a un acuerdo, respecto al faltante de aceite de girasol en las góndolas, no hubo claridad por parte del sector empresario respecto a lo que está pasando.

Carnes y aceites

Las aceiteras aseguran que están cumpliendo con producción y abastecimiento y que no saben si el producto se queda en los distribuidores mayoristas o se lo guardan los supermercados, afirmaron fuentes oficiales. Frente a esta situación, Comercio Interior envió a la Cámara de la Industria Aceitera (Ciara) los resultados de un relevamiento de 200 puntos de venta donde se registró faltante de aceite para que las productoras se avengan a seguir el trazado de la entrega de productos.

Así, se investigarán a distribuidores y a supermercados para ver por qué el abastecimiento de aceite de girasol está muy por debajo del promedio, siendo un consumo difundido. Por otra parte, Comercio Interior también comenzó a trabajar en la canasta de productos frescos, como lo hizo con la de secos, con el objetivo de recomponer el consumo interno de carne a pecios accesibles.

La idea es estandarizar un esquema para monitorear que el consumo de proteínas no baje de los 115 kilos anuales de carne por habitante, de los cuales 55 sería de carne vacuna; 40 de pollo; 10 de cerdo; y 5 de pescado. "Hoy hay menos regulación que en 2015 con mayores precios internacionales. Las retenciones son menores y no hay cupos", describió desde el área que conduce Feletti, para graficar la situación actual del sector. Así, con la canasta de productos frescos se buscará asegurar un abastecimiento mínimo.

La Secretaría de Comercio Interior avanzará en su armado y la va a presentar a los ministerios de Agricultura, de Desarrollo Productivo y de Economía en el corto plazo. En el marco de las potenciales iniciativas que se encuentran bajo análisis, en Comercio Interior estiman que con fijar en 20% la relación de la exportación sobre la faena de carne vacuna, junto con retenciones del 15% a las exportaciones, se podría estabilizar una oferta de 55 kilos anuales por habitante.

Incluso, puede haber un proceso en el cual primero se puedan llevar las retenciones del 9% actual al 12% y asegurar 52 kilos anuales por habitante, y después avanzar en el otro tramo hasta el 15%.