El último informe que publicó el Indec respecto al mercado de trabajo arrojó buenos resultados sobre el cierre del 2021. Mientras a nivel nacional se produjo una importante reducción del desempleo, el Gran Buenos Aires registró un desplome aún mayor y fue la región que más redujo la desocupación en todo el país. Al mismo tiempo, hubo un fuerte avance del empleo en mujeres, que marcó un récord en casi dos décadas.
Durante el cuarto trimestre del 2020, la desocupación en el Gran Buenos Aires era del 12,6% y lideraba este indicador a nivel nacional. Según las últimas estadísticas oficiales, el desempleo en esta región se desplomó al 7,4% y se redujo 5,2 puntos porcentuales a nivel interanual. De esta manera, se trató de la disminución más relevante registrada en todo el país.
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Asimismo, la tasa de actividad se aceleró del 44,9% al 47,6% en el cuarto trimestre del año pasado. En tanto, la tasa de empleo se incrementó del 39,3% en 2020 al 44,1%, lo cual demuestra el proceso de recuperación de puestos de trabajo en la zona geográfica más poblada del país.
El resto de las regiones que componen la base de análisis del Indec también reflejaron un buen desempeño, pero en menor proporción. En detalle, el desempleo en Cuyo bajó del 8,4 al 6%, en el Noreste del 5,8 al 4,6%, en el Noroeste del 7,2 al 5,8%, en la región Pampeana del 11,1 al 7,4%; y en la Patagonia se redujo del 7,2 al 4,5%.
Qué pasó a nivel nacional
A nivel nacional, el desempleo bajó al 7% en el cuarto trimestre del 2021 y se desplomó cuatro puntos en la comparación interanual. En el mismo periodo, la tasa de empleo alcanzó un máximo histórico ubicándose en el 43,6% de la población.
Según las estadísticas, hay cerca de 900.000 personas sin trabajo bajo el parámetro de medición que contabiliza a 29 millones de argentinos dentro de 31 aglomerados urbanos. Si se extiende este cálculo a la población total del país, el número de desempleados asciende a poco más de tres millones.
En detalle, la tasa de desocupación disminuyó 1,2 puntos con respecto al tercer trimestre del año pasado. A su vez, frente al cuarto trimestre de 2020, el indicador cayó cuatro puntos y se estacionó en el nivel más bajo desde 2016. Según el documento oficial, la tasa de actividad en el cuarto trimestre de 2021 alcanzó el 46,9% de la población y creció 0,2 puntos porcentuales respecto al trimestre anterior (46,7%) y 1,9 puntos respecto al mismo trimestre de 2020 (45%).
El valor alcanzado en el último trimestre del año se encuentra por encima de los promedios de 2018 (46,6%) y 2017 (45,9%) y está levemente por debajo de los niveles de actividad máximos de 2019 (47,3%), que fue un año con aumento inusual de la tasa de actividad
Cabe remarcar que la tasa de empleo alcanzó un máximo histórico ubicándose en el 43,6% de la población. Desde el inicio de la serie publicada por INDEC en 2016, la tasa de empleo no había logrado superar el 43%. El dato del cuarto trimestre de 2021 se incrementó 0,7 puntos respecto del tercer trimestre (42,9%) y 3,5 puntos respecto del mismo trimestre de 2020 (40,1%).
Por cuestiones estacionales, la desocupación baja en los cuartos trimestres del año, así es que en el cuarto trimestre de 2017 (7,2%) y en el de 2016 (7,6%) se encuentran los anteriores registros más bajos desde 2016. De esta forma, el año 2021 cerró con una tasa de empleo récord y con niveles de desocupación por debajo de los registrados desde 2016
Récord de empleo para las mujeres
Con las últimas cifras, las mujeres alcanzaron un récord en su tasa de empleo desde 2003. Este segmento de la población cerró 2021 con un aumento interanual en el empleo de 4,5 puntos. Además, entre 2020 y 2021, disminuyeron sus tasas de desempleo de 11,9% a 7,7%. En las mujeres jóvenes, esta mejora fue de casi 10 puntos: pasó del 26% a 16,2%.
Según la Organización Internacional del Trabajo, de los 4,5 millones de puestos que faltan recuperar en América Latina, 4,2 millones corresponden a mujeres. Solo en Argentina y en Bolivia las mujeres recuperaron los niveles previos a la pandemia.
Al respecto, la directora Nacional de Economía, Igualdad y Género, Mercedes D'Alessandro, afirmó en su cuenta de Twitter: "Esta situación de Argentina es producto de un diagnóstico temprano: sabíamos que las crisis afectan más a las mujeres. De ese modo, en 2020 se pusieron en marcha medidas para amortiguar el impacto desigual de la pandemia a través de un trabajo articulado entre ministerios".
"Cuando la economía empezó a recuperarse, el trabajo conjunto entre Estado nacional y con las provincias permitió avanzar y diseñar medidas para promover y mejorar la inclusión laboral de las mujeres, formalizar empleos y bajar el desempleo", aseguró la funcionaria. Y agregó: "Las políticas de género hacen bien a la macroeconomía. Más empleo, más ingresos, menos pobreza, menos niños, niñas y adolescentes en hogares pobres".