La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, rechazó este lunes que la guerra en Ucrania esté provocando un “estancamiento” en la economía del bloque monetario. El pronóstico de la economista francesa, ex número uno del FMI cuando el organismo entregó al macrismo el mayor préstamo en su historia, se contrapone con el que realizan otros entes multilaterales de crédito. Tanto el FMI como el Banco Mundial alertaron por una desaceleración de la actividad global y del intercambio comercial y mayores presiones inflacionarias.
“No vemos actualmente ningún signo de estancamiento”, afirmó la ex directora gerente del Fondo en una sesión de preguntas y respuestas en el Instituto Montaigne de París, de acuerdo con lo consignado por la agencia AFP. Para Lagarde, no hay posibilidades de “estanflación”, es decir, un crecimiento lento o estancamiento acompañado de una alta inflación.
“Dada la recuperación en curso, no vemos que la economía se estanque en 2022, 2023 o 2024”, subrayó la funcionaria, aunque reconoció que la guerra traerá “consecuencias” en el crecimiento a causa de la aceleración de la inflación y la menor confianza. En las últimas semanas, diversos economistas advirtieron que el conflicto bélico podría agravar el fenómeno inflacionario en la Eurozona y detener el rebote en la economía luego del desplome durante la pandemia de coronavirus.
“No vemos actualmente ningún signo de estancamiento”
Durante febrero, la inflación en el conjunto de los países del Euro marcó una cifra récord del 5,8%, y se espera que en marzo sea aún más alto, ya que el dato únicamente comprendió los cinco primeros días posteriores a la invasión de Rusia en Ucrania. Los alimentos, los combustibles y la energía se presentan como los productos más impactados, dada la dependencia del continente de los dos países implicados en la guerra.
Respecto a la electricidad, las miradas están puestas en la Cumbre Europea que se desarrollará este jueves y viernes, donde los países se dividen entre posturas -concentradas en los del sur- que favorecen una intervención en el mercado mayorista energético colocando límites en los precios del gas, y otros que se niegan a ello. Asimismo, se analizará la posibilidad de gravar las ganancias extraordinarias de algunas empresas energéticas, de acuerdo a la agencia Bloomberg.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) indicó el último jueves que la invasión de Rusia en Ucrania podría “poner en duda” el fuerte rebote económico mundial tras la pandemia de coronavirus, produciendo más inflación y menor crecimiento. En el caso de UE, la OCDE estimó que la guerra podría provocar una reducción de su crecimiento de 1,4% a lo largo del año.
El BCE ya reconoció las menores expectativas en la expansión de la economía y a principios de este mes redujo su previsión de crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) para este año de 4,2% a 3,7%, y la de 2023 de 2,9% a 2,8%. Del mismo modo, la inflación, anteriormente estimada en 3,2%, ahora se espera que escale al 5,1% anual.