La deuda que el Estado nacional mantiene con las empresas generadoras mayoristas de energía eléctrica empieza a dar grandes dolores de cabeza al Gobierno. La semana pasada Luis Caputo propuso al sector cancelarla mediante bonos, una idea no del todo bien recibida por los empresarios. Ahora, el propio Javier Milei dijo que les pagará en junio con el superávit acumulado para ese entonces. Pero las cuentas no cierran, porque ese mismo superávit se generó, en parte, por posponer el pago de estas deudas.
El pasado jueves, el ministro de Economía se reunió con las empresas generadoras mayoristas de electricidad y productoras de gas para presentarles una propuesta sobre la deuda estatal para con ellas. Se trata de un monto de 1.200 millones de dólares y corresponde a los meses de diciembre de 2023 y enero de 2024. Al mismo tiempo, el Gobierno prometió comenzar a regularizar la deuda generada a partir de febrero. La deuda total asciende a 2.000 millones de dólares.
Con la mira en evitar que esa abultada cifra genere un desequilibrio en el buscado superávit fiscal de los primeros meses, que apenas se logró repetir en marzo tomando los gastos en base caja y no los devengados, la idea que llevó Caputo a sus interlocutores empresarios fue la de ofrecerles un bono por un valor nominal total de 600 millones de dólares para cancelar la deuda correspondiente a diciembre y enero.
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Sin embargo, las empresas no recibieron esta propuesta con buenos ojos. Especialmente, porque implica una promesa de pago por solo la mitad de la deuda total de esos meses, es decir, una quita del 50%.
En este sentido, fuentes oficiales al tanto de las negociaciones reconocieron a El Destape que los empresarios "no se convencieron" con la oferta presentada, pero remarcaron que "la voluntad del Gobierno (para pagar con bonos) está", y que las generadoras mayoristas de electricidad deben entender el "esfuerzo" que todos tienen que hacer en este momento de crisis.
La propuesta de Milei: pagar la deuda de CAMMESA en junio con superávit
Por eso, ahora Milei salió con una propuesta alternativa. "Los pagos de CAMMESA se van a hacer a mitad de año, en el mes de junio", afirmó en declaraciones a Radio Rivadavia, y agregó que el pago se podrá afrontar debido a que "a lo largo de los primeros cinco meses estamos generando mucho superávit financiero".
Las fuentes oficiales explicaron a este portal que este nuevo plan enunciado por Milei no invalida el del pago con bonos propuesto por Caputo y que, en todo caso, esos eventuales títulos, de ser aceptados por las empresas mayoristas, podrían ser precancelados en junio.
Pero el problema es que la idea de pagarle a las generadoras de electricidad con superávit es conceptualmente absurda, porque para alcanzar ese mismo superávit el Gobierno debió, justamente, posponer el pago de esas mismas deudas.
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"Con lo que se acumuló del superávit no se puede pagar a las eléctricas, básicamente, porque, si pagás, no tenés superávit", lo resume Martín Epstein, economista del CEPA, y añade que "o bien rompen el primer trimestre de superávit y cierran el mes que viene con déficit y se ponen al día con la deuda que tienen, o bien siguen pateando deuda para adelante".
De hecho, el propio Milei admitió que "cuando vengan esos números (del pago de la deuda a las empresas mayoristas) operativamente vamos a quedar en déficit, pero con lo acumulado antes las cuentas siguen equilibradas".
Además, para Epstein es improbable que el Gobierno pueda acumular fondos suficientes en estos dos meses próximos para pagar con un verdadero superávit: "Caputo está jugando fuerte a que se puedan acumular reservas más fuertes con la liquidación de la cosecha gruesa, pero por ahora eso no está pasando", advierte, y agrega que "el mes que viene les va a costar más todavía cerrar el déficit, porque no hay ningún indicio de que la recaudación pueda crecer".
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