La regresiva política económica que aplicó el gobierno de Javier Milei en su primer año –la que el referente conservador estadounidense Ben Shapiro calificó como el ‘el experimento económico más grande de la historia moderna’—implicó una transferencia inédita de riqueza desde los sectores populares hacia el empresario concentrado. No existe un ejemplo de instauración de un modelo de empobrecimiento de esta magnitud en el mundo durante un gobierno democrático (más allá de algunas prácticas poco democráticas que utiliza La Libertad Avanza).
Como resultado, en apenas doce meses de gestión, los principales grupos económicos duplicaron en promedio su rentabilidad real (descontado el efecto inflacionario) y algunos empresarios llegaron a acumular en tres trimestres una tasa de retorno de más de 40 por ciento, muy por encima de los promedios históricos, como el caso de Eduardo Eurnekian, con AA2000, el ex jefe y patrocinador de la candidatura de Milei. La contracara: pérdida de poder adquisitivo de asalariados y jubilados.
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La pérdida de poder adquisitivo de los ingresos, producto del cambio en la política económica implementado por el gobierno de Javier Milei, representó la mayor caída mensual de los últimos 30 años. Sólo durante diciembre del año pasado, el salario promedio registrado se redujo un 11,4 por ciento. Si bien, en septiembre habían evidenciado una recuperación con respecto a ese primer desplome, el promedio de los primeros 10 meses de gestión (diciembre a septiembre, medido por el Sistema Integrado Previsional Argentino) evidencia una caída del 8,4 por ciento interanual en el poder adquisitivo, situándose en niveles similares a los de 2007.
Las caídas más significativas fueron en los ingresos de las familias que dependen del Estado es una de las características salientes de los primeros meses de gobierno: jubilaciones, salarios públicos y programas sociales representan prácticamente el 50 por ciento del ajuste histórico que llevó adelante este gobierno.
Esta licuación de ingresos se transfirió vía devaluación –y consecuente inflación— hacia el sector económico más concentrado. Un informe de Cifra-CTA sostiene que las empresas que cotizan en Bolsa informaron para el acumulado de los primeros tres meses del año una duplicación en su ganancia real respecto de igual período del 2023, pasando del 9,6 por ciento al 21 por ciento. Solo dos firmas, HOLCIM y Molinos Río de la Plata mostraron una disminución de su tasa de utilidad sobre ventas de 2,7 y 2,4 puntos porcentuales respectivamente. Las 13 empresas restantes promediaron una mejora de 13,6 puntos porcentuales en su rentabilidad.
De acuerdo con los informes elevados a la Comisión Nacional de Valores (CNV), una de las principales ganadoras del modelo Milei fue Aerolíneas Argentinas 2000, del ex empleador del Presidente. La grupo económico que comanda Eurnekian pasó de registrar en los primeros tres meses del año un 23,8 por ciento de ganancia sobre ventas a un 40,2 por ciento. Otra firma que obtuvo un buen desempeño, aunque ya venía siéndolo del año pasado, fue Pampa Energía, que pasó de 35,7 por ciento en dicho período del 2023 a 36,3 por ciento este año. Un caso destacado merece el balance de Richmond, que pasó de registrar una pérdida de 17,1 por ciento en los primeros nueve meses del año pasado a ganar –con una desregulación del sector farmacéutico mediante—un 31 por ciento.
Tecpetrol casi triplicó su ganancia, pasando de 13,1 a 30,5 por ciento, mientras que Loma Negra (aún con la obra pública y privada paralizada) casi cuadruplicó su rentabilidad (de 9,7 por ciento en 2023 a 26,1 por ciento en 2024). La empresa aún estatal disparó su retorno sobre ventas casi diez veces, pasando de 2,2 por ciento en los primeros tres trimestres del 2023 a 20,5 por ciento en el acumulado de este año. Le siguen mejoras en Transportadora Gas del Sur (de 13,5 a 27,7 por ciento), Pan American Energy (de 14,2 a 19,9 por ciento), Mirgor (de cerrar con ganancia cero a una rendimiento de 11,4 por ciento), Mastellone (de 1,9 a 7,1 por ciento, a pesar de la caída en las ventas de leche), Edenor (de 14 a 16,6 por ciento) y Arcor (de 10,3 a 27 por ciento).
El salto en la rentabilidad se explicó por una suba muy importante de las utilidades en el primer trimestre de 2024 cuando alcanzaron tasas de rentabilidad promedio de 39 por ciento con un impacto considerable de los ingresos financieros asociados a la devaluación de diciembre. Luego en el segundo y tercer trimestre la rentabilidad disminuyó aunque se mantuvieron por encima del año previo