Comprar dólares y guardarlos es la forma de ahorrar más clásica que tienen los argentinos. Lo más común es que las personas apenas obtengan los billetes, vayan corriendo a esconderlos en alguna parte de sus hogares.
Sin embargo, los papeles verdes pueden deteriorarse si no se guardan de forma correcta. Si están en un lugar muy húmedo, pueden crecer hongos; si están en contacto con el sol, pueden perder el color; si están muy expuestos a la manipulación, pueden romperse.
Teniendo esos riesgos en cuenta, aquellos que quieran guardar sus dólares por fuera de los bancos deben entender qué “escondites” pueden afectar al papel moneda.
Los errores más comunes a la hora de guardar los dólares
- El primer error al almacenar papel moneda extranjera es colocarlos en ambientes húmedos o recipientes como latas. La humedad representa el mayor riesgo para los billetes. Por lo tanto, se aconseja buscar un lugar seco y evitar la exposición al calor, como áreas cercanas a estufas, que deben ser descartadas.
- Algunos eligen guardarlos en latas, pero con el tiempo, los billetes pueden deteriorarse por el óxido y mancharse.
- Una alternativa más económica es guardar los dólares en pequeños fajos dentro de bolsas con cierre hermético para conservación.
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Guardar fajos de dólares con bandas elásticas es una práctica muy extendida pero también un error común. Con el tiempo, el material de las bandas se desgasta, se vuelve pegajoso, se adhiere a los billetes y los mancha. En lugar de usar bandas elásticas, una excelente alternativa es envolver los billetes con papel.
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Doblar los billetes por la mitad no es aconsejable, ya que puede dejar marcas, especialmente en las series más antiguas de dólares conocidas como "cara chica". Esto podría causar daños en el papel moneda, por lo tanto, se recomienda dejar los billetes extendidos.
¿Cómo distinguir un dólar cara chica?
Los dólares de cara chica son los billetes de 100 dólares emitidos entre 1914 y 1996, denominados comúnmente "cara o cabeza chica". Se les atribuye este nombre debido a que presentan una imagen reducida de Benjamin Franklin en el centro del billete, dentro de un marco ovalado.
Posteriormente a esta serie de dólares, se emitieron otros hasta el año 2013 en los cuales los retratos son considerablemente más grandes y el marco ovalado se extiende hasta los bordes del billete. Estos billetes son conocidos como "cara o cabeza grande".
Por último, a partir de 2013 se introdujo una nueva serie, coloquialmente conocida como "los azules" debido a que los billetes de 100 dólares están atravesados por una banda de seguridad de ese color. En esta serie, ya no hay marco alrededor de la imagen, que ahora incluye el rostro y los hombros, presentándose aún más grande. Estos billetes son aceptados sin problemas y no experimentan una reducción en su valor.