En una semana de fuerte apreciación del dólar en el mundo, en la plaza local la versión blue opera con una baja de 1 peso en el mercado paralelo y cerró a 306 pesos, mientras que las cotizaciones ligadas a la actividad financiera se acercaron a los 340 pesos. El blue suma este viernes su segunda rueda consecutiva en baja, tras haber trepado a los 308 pesos durante la semana y ubicarse en sus máximos de los últimos tres meses.
Tras la baja la brecha entre el dólar informal con el tipo de cambio oficial se ubica por debajo del 87 por ciento. Por su parte, el dólar contado con liquidación cerró en 331 pesos tras tocar los 338 pesos, mientras que el Bolsa o MEP finalizó en 315,41 pesos.
La cotización minorista se vendió a un promedio de 169,89, la versión ahorro de la moneda norteamericana se ofreció a 277,68 y el dólar turista se ubicó en 338,50.
La escalada inflacionaria que podría alcanzar el 100 por ciento este año, un elevado déficit fiscal, pocas reservas en el Banco Central (BCRA) y tensiones políticas y sociales crean un clima incierto entre los inversores que buscan coberturas es el argumento de algunos analistas para la suba.
También apuntan a las reservas disponibilidad, aunque el Central sumará "5.000 millones de dólares producto de la liberación de parte del swap después del acuerdo con China (...) Tenemos disponible para trabajar en el mercado único libre de cambios 10.000 millones (de dólares)" con lo aportado de agroexportadores en septiembre, dijo a la prensa el ministro de Economía, Sergio Massa.
Más allá de este delicado escenario financiero que enfrenta la Argentina, existen presiones especulativas para que el Gobierno devalúe o continúe creando nuevas versiones de tipos de cambio diferenciados por sector o actividad.
Básicamente, los agroexportadores mantienen su presión por que se repita la experiencia del dólar-sojero, con una tipo de cambio diferencial (actualizado por la devaluación de los últimos dos meses) en torno a los 215 o 220 pesos. Ya lo consiguieron dos veces, una a fines de 2020 y otra en septiembre.
También hay presiones en el segmento ilegal que provienen de las expectativas sobre el resultado que tenga la aplicación de un dólar para que turistas extranjeros cambien sus divisas en el mercado oficial. Esto, de ser efectivo, podría quitarle oferta al paralelo y eso eleva el precio que se ofrece a los particulares.
De todos modos, en términos reales evidencian una fuerte caída en la brecha cambiaria. Desde el pico que se registró el 22 de julio último, el blue pasó de 338 pesos a los 306 con que se ofreció este miércoles en las cuevas del microcentro.
En contraposición, en el mismo lapso el tipo de cambio oficial (sin impuestos) pasó de 136 a 169 pesos, con una apreciación del 23 por ciento, lo que explica la caída en la brecha. De todos modos, las presiones en el paralelo no se detienen.