En el cuarto trimestre de 2020 se observó un incremento en el precio del metro cuadrado en alquiler de los departamentos usados, que promedió un 53,8 por ciento para los monoambientes y para los departamentos de dos ambientes y un 63,7 por ciento para las unidades de tres ambientes respecto de igual período del año pasado. Los valores de acceso a la vivienda aceleraron la suba respecto del trimestre anterior, pese a los cambios que hubo en el esquema de contratación, según datos de la Dirección de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires.
La Ley Nacional de Alquileres modificó en junio del año pasado el Código Civil y Comercial de la Nación y estableció nuevas reglas para los contratos de locación. Entre algunas de las modificaciones se encuentran: extensión del plazo de duración de los contratos a tres años y la periodicidad de actualización anual en base a un coeficiente entre el Índice de Precios Al Consumidor (IPC) y la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE). De hecho, el Gobierno decidió extender hasta el 31 de marzo próximo el congelamiento de los alquileres y la suspensión de los desalojos.
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Pese al nuevo marco regulatorio, los valores de los alquileres se dispararon en la última parte del año pasado. En términos interanuales, el aumento en el valor de los alquileres verificó un fuerte incremento respecto del trimestre previo, de 5,9 puntos porcentuales para los de un ambiente, de 6 puntos para dos ambientes y 11,9 puntos para tres ambientes. "Dichas importantes aceleraciones se suman a las de julio/septiembre enmarcándose en un contexto de plena vigencia de la nueva ley de alquileres", reconoce el ente estadístico del gobierno porteño.
El aumento de los precios de los alquileres para todas las unidades consideradas fue muy superior a la variación estimada por el IPC porteño que, en promedio para octubre-diciembre, alcanzó un 30,6 por ciento en términos interanuales. "De esta manera, por segundo trimestre consecutivo se modificó la tendencia; es decir que los alquileres se valorizaron a un ritmo muy superior al registrado por la trayectoria de los precios al consumidor, en oposición a lo sucedido entre julio-2018 y junio-2020", sostuvo el informe oficial.
Precios por zona
Por barrio, los alquileres más elevados computados para los monoambientes usados se verificaron en Palermo (21.275 pesos) y Belgrano (21.085); en tanto los departamentos de menor valor se observaron en San Cristóbal (17.096). Para el caso de los usados de dos ambientes, los mayores valores correspondieron a unidades de Núñez (29.576 pesos), seguido de Palermo (28.656). Por su parte, en Montserrat, con un alquiler de 22.410 pesos, se encontró "la renta media más baja".
Para un departamento usado de tres ambientes, Belgrano (47.489 pesos) y Villa Urquiza (45.746 pesos) constituyeron los barrios más costosos, mientras que en el otro extremo se posicionó Flores (33.366). La brecha de precios entre la comuna con los alquileres más costosos y la de menor valorización fue máxima para el segmento de tres ambientes, con una diferencia de 33,3 por ciento. "Para todos los conjuntos de departamentos usados se verificó una mayor concentración de los precios por comuna en torno a los alquileres promedio, con distancias relativamente más acotadas entre valores máximos y mínimos", de acuerdo con la información oficial.
Los rangos de precios mínimos mayormente en el suroeste de la Ciudad y los topes máximos al norte. Para los segmentos de uno y dos ambientes los alquileres más elevados correspondieron a unidades de la Comuna 14, mientras que para los de tres ambientes, a la Comuna 12. En tanto que los valores promedio más bajos se alcanzaron en la Comuna 10 para los monoambientes, en la Comuna 3 para los 2 ambientes y en la Comuna 7 para los de tres ambientes.
"Esto obedece a factores históricos que propician la valuación inmobiliaria diferencial, en base a cuestiones de conexión y acceso, calidad urbanística y arquitectónica del entorno y factores socioculturales, entre otras causas", argumenta el informe oficial.
En cuanto a la composición de la oferta de departamentos en alquiler, una gran parte estuvo constituida por unidades de dos ambientes, las cuales alcanzaron el 45 por ciento del total de las publicaciones efectuadas en el período. El segmento de un ambiente (28,8 por ciento) superó en peso al conjunto de departamentos de tres ambientes (19,5 por ciento).
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