Por la crisis laboral y la inflación, 8 de 10 personas recortaron gastos

Las expectativas respecto de los actuado hasta el momento por el gobierno de Javier Milei se deterioraron fuertemente, así como también la realidad de los encuestados en una muestra realizada por la consultora Pulso Social. A poco más de seis meses de administración de La Libertad Avanza, el 80 por ciento de la población recortó gastos esenciales y secundarios y espera que la situación sea aún más compleja en la segunda mitad del año. 

Para la muestra nacional se realizaron 1200 casos en todo el país con detallado peso relativo de cada una las regiones. Sumado a eso, hicieron 2800 extras para poder hacer análisis algunas provincias especial interés este estudio. En la consulta sobre los cambios de hábitos que obligaron las medidas del Gobierno, "se destaca el recorte de cosas importantes que no se pueden pagar (41 por ciento) y de salidas, gustos, hobbies u ocio (38 por ciento)".

Respecto al momento de su designación, Milei perdió imagen positiva y ganó en negativa. La encuesta advierte que el 51 por ciento mantiene la imagen positiva del Presidente, mientras que el 40 por ciento considera que es muy mala y el 7 por ciento, mala. Las más críticos son las personas agrupadas en el rango etario de 30 y 44 años, con el 53,3 por ciento de los encuestados. 

Las miradas respecto a la capacidad de acción del Gobierno tras la aprobación de la Ley Bases. El 37 por ciento mantiene cierto estado de esperanza, mientras que el 30 por ciento manifiesta preocupación por el futuro. En este caso, el 46 por ciento considera que la gestión va en la dirección equivocada y el 47 por ciento sostiene que se mueve hacia la dirección correcta.

En cuanto a las condiciones presentes y futuras, el 53 por ciento de los encuestados considera que su situación es peor que hace seis meses atrás y el 43 por ciento anticipa que incluso empeorará en los próximos seis meses.

Cómo viene repitiéndose en otras encuestas, las principales preocupaciones económicas, entrelazadas y potenciadas entre sí, son los bajos salarios (23 por ciento), la inflación (23 por ciento), la pobreza (15 por ciento), el desempleo (13 por ciento) y la inestabilidad laboral (6 por ciento).