Producto del desplome económico mundial, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) proyectó que un 90% de los trabajadores informales en Latinoamérica podría ingresar ingresar bajo la línea de pobreza. Ese porcentaje representa a 140 millones de personas.
El titular de la OIT Guy Ryder tuvo una video conferencia el miércoles con funcionarios de Trabajo de diferentes regiones y la organización mundial de empleadores (OEI). Allí analizaron los posibles escenarios para el retome de la actividad económica, bajo la consigna de “privilegiar la salud de las personas”. La organización sostuvo que "muchas personas afrontan un dilema irresoluble: morir de hambre o morir por el virus".
"América Latina es una de las regiones más vulnerables a la crisis por la alta tasa de empleados informales ", puntualizó la experta de la OIT Elva Mourelo. La región posee un 53 % de labores en rango informal.
Todos aquellos vendedores ambulantes, empleados domésticos, taxistas por cuenta propia y otros trabajadores del sector informal perdieron gran parte de su sustento, que según la OIT, afecta a 1.600 de los 2.000 millones de personas con este tipo de empleos en el mundo.
De esta manera, la pobreza relativa de los trabajadores en negro podría crecer con la crisis del 36 % al 90 % en Latinoamérica (140 millones de personas), del 17 % al 77 % en Norteamérica (147 millones) y del 34 % al 80 % en Europa y Asia Central (80 millones).