La secretaria de Energía, Flavia Royon, ratificó hoy el interés de la compañía Power China en sumarse al financiamiento para la construcción de la segunda etapa del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner (GPNK), cuya finalización permitirá al país garantizar su autoabastecimiento y exportar gas en forma competitiva a las naciones vecinas.
La cartera energética informó que en su segunda jornada de trabajo en la República Popular de China, la secretaria Royon repasó los ejes de los encuentros que sostuvo junto al ministro de Economía, Sergio Massa, con foco en asegurar las inversiones necesarias para completar la infraestructura de transporte en materia hidrocarburífera y eléctrica.
El tramo en cuestión se extenderá por 467 kilómetros desde la localidad bonaerense de Salliqueló hasta San Jerónimo, en el sur de Santa Fe, una obra que demandará una inversión de US$ 1.900 millones, según las estimaciones oficiales.
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"Ayer trabajamos en el financiamiento de la segunda etapa del gasoducto a partir de un crédito preacordado con la empresa Power China. Cuando se complete el total de la obra, nuestro país va a ahorrar casi 8.000 millones de dólares anuales", dijo la secretaria.
Para fines de junio se estima que ya esté en funcionamiento el primer tramo del gasoducto que transportará el gas de Vaca Muerta hasta la provincia de Buenos Aires.
"Ya en esta segunda mitad de 2023, con el gasoducto operativo, ahorraremos 2.000 millones de dólares, eso se duplicará para el año siguiente, con una mejora fiscal de 4.200 millones", dijo la funcionaria.
"La construcción de la primera etapa es un esfuerzo íntegro del Estado argentino, que puso todos los recursos para su financiamiento", agregó.
A esto se suman obras complementarias como la reversión del Gasoducto Norte y la instalación de plantas compresoras que consolidarán la capacidad de transporte local y los flujos necesarios para alcanzar el autoabastecimiento en materia de gas.
"Cuando esté todo completo vamos a estar habilitados para comenzar a exportar un volumen considerable de gas tanto a Chile como también a Brasil y Uruguay" aseguró Royon.
La secretaria hizo hincapié en que las obras en curso apuntan a revertir una balanza energética negativa, donde la sustitución de importaciones impactará positivamente en las cuentas públicas y en la mejora de la competitividad industrial del interior de la Argentina.
"El sector energético en particular tiene la posibilidad de brindarnos un costo de gas mucho más competitivo, lo que le permite al estado nacional un ahorro en subsidios. Además, el Gasoducto Néstor Kirchner no impactará positivamente sólo en el sector de usuarios residenciales, también es fundamental para el desarrollo de la industria, porque otras ramas de la actividad económica, como la minería en el Norte, van a contar con gas", remarcó.
Con información de Télam