El Senasa prorroga por dos años acciones de prevención contra la Fiebre Aftosa en el norte del país

11 de enero, 2023 | 09.32

El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) prorrogó por dos años las acciones de prevención y vigilancia de la Fiebre Aftosa en los departamentos ubicados en la frontera norte del país, las cuales vencían el 31 de diciembre pasado.

La decisión, dispuesta mediante la Resolución 28/2023 publicada hoy en el Boletín Oficial, se tomó ante el hecho de que “se mantienen las condiciones sanitarias existentes” al establecer estas medidas en octubre de 2020, y que las medidas tomadas desde ese entonces lograron “un impacto positivo en la cobertura vacunal”.

Entre otras acciones, se llevan a cabo de manera coordinada entre el Senasa y los sectores productivos involucrados, diversas campañas de vacunación considerando las condiciones epidemiológicas, geográficas y climática.

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Del mismo modo, se definió un programa continuo de evaluación de los entes sanitarios de aplicación de las vacunas a nivel nacional, donde se evalúan tanto sus capacidades operativas como la administración de sus recursos.

Además de la vacunas, cuyo financiamiento se realiza en colaboración con diferentes sectores de la cadena cárnica, se encararán acciones de vigilancia epidemiológica en la zona con muestreos periódicos y anuales, “a efectos de demostrar el grado de inmunidad de los animales vacunados y la ausencia de transmisión viral”, como también para “mejorar la notificación de enfermedades confundibles” con la fiebre aftosa.

Además, el Senasa, en conjunto con los entes sanitarios, realiza acciones en terreno para registrar los animales en los sistemas de gestión sanitaria.

Las iniciativas también incluyen un “mecanismo solidario de la cadena de la carne para llegar a los pequeños productores de la frontera norte del país, a través del financiamiento de la vacuna antiaftosa en ese estrato”.

El fortalecimiento de estas acciones -establecidas en 2020 y prorrogadas hoy- se debe al hecho de que la zona de la frontera norte es considerada como zona libre de Fiebre Aftosa por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) y, al mismo tiempo, Bolivia y Brasil “han expresado la decisión de avanzar hacia el levantamiento de la vacunación” en varios estados o departamentos que limitan con la Argentina.

Por estos motivos se consideró conveniente “consolidar aún más el sistema preventivo y resguardar el estatus sanitario alcanzado”, además de colaborar en la “protección del sistema productivo e industrial ganadero en su conjunto, así como el acceso a los mercados internacionales”, señala la normativa.

Actualmente Argentina es una zona libre de Fiebre Aftosa y posee dos zonas libres con vacunación –cada año se aplican 80 millones de dosis- en la zona fronteriza del norte y el centro y norte del país, y tres zonas libres sin vacunación en la Patagonia y San Juan, área que, por sus condiciones naturales y patrones de movimientos, se mantuvo indemne durante la epidemia que afectó al país a comienzos de los 2000.

El último foco de la enfermedad fue detectado en el país en el 2006 y la última zona sin ser declarada como libre de Fiebre Aftosa –precisamente la del Cordón Fronterizo- fue designada bajo dicho estatus en febrero de 2011.

La Fiebre Aftosa es una enfermedad viral muy contagiosa que afecta a animales de doble pezuña –como es el caso del ganado bovino- y que se caracteriza por fiebre y ampollas en boca, nariz, pezones y patas.

Es transmisible por productos de origen animal, lo cual condiciona el comercio de los mismos por las restricciones impuestas globalmente generando pérdidas económicas y cierre de mercados.

En el caso de los humanos, no se trata de una enfermedad fácilmente transmisible y no representa un riesgo de salud pública.

Con información de Télam