Llega diciembre y con él se viene el cobro del aguinaldo. Sin el dólar como la estrella de las inversiones, este fin de año abre la posibilidad de aprender otras formas de inversión que a veces parecen sofisticadas pero que la tecnología simplificó y acercó a un click, como la compra de acciones, de bonos del Tesoro o de ON que emiten las empresas y que tienen diferentes rendimientos asociados con el riesgo de la inversión.
Cuánto paga el plazo fijo
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La tradicional opción de los ahorristas argentinos pasa por la constitución de plazos fijos, un instrumento sencillo, al alcance de los clientes bancarios y con un rendimiento que en los últimos años estuvo “palo a palo” con la inflación, con momentos de mejor rendimientos y otros, como a lo largo de este último año, que “la corrió de atrás”.
La tasa actual de los plazos fijos ronda el 3% mensual, con pequeñas variaciones según la entidad bancaria, y fue en octubre por primera vez positiva frente a la inflación, que se ubicó en 2,7% según el INDEC. Mientras la inflación se mantenga por debajo de 3%, la tasa será positiva y a medida que el Gobierno logre mayor estabilidad de precios también pierden atractivos los plazos fijos UVA, que remuneran la inflación más 1% anual.
La otra inversión estrella, la compra del dólar billete, fue considerada la peor inversión del año. De punta a punta, el dólar financiero que se adquiere en forma legal a través de la compra venta de acciones o bonos rindió menos de 10% frente a una inflación acumulada de 107%. La cotización del dólar bolsa que arrancó el año en un promedio de $991 y que a mitad de año registró el pico de $1.500, se ubica en la actualidad en $1.076.
En qué invertir el aguinaldo: consejos a tener en cuenta
El aguinaldo, o sueldo anual complementario, es el sueldo extra que se abona cada año en dos cuotas, en julio y diciembre, a los empleados en relación de dependencia y una práctica que también suele extenderse a los trabajadores informales, aunque con la flexibilización laboral nuevas formas de contratación como las derivadas de las aplicaciones no lo reconocen.
Con el plazo fijo y el dólar fuera de la agenda, es la oportunidad de explorar las distintas alternativas de inversión, también sencillas de realizar y con riesgos acordes a la rentabilidad que se esté buscando. Para determinarlo, la Comisión Nacional de Valores diseñó un cuestionario que es obligatorio antes de invertir y que permite determinar el perfil de ahorro y guía en los instrumentos disponibles.
En general, la primera decisión que se debe tener en cuenta a la hora de definir una cartera de inversión es la expectativa de tiempo que mantendrá el ahorro. A corto plazo, opciones más conservadoras son en general las mejores, mientras que a largo plazo se puede pensar en tomar mayor riesgo, asumiendo que las futuras correcciones del mercado van quitando volatilidad.
Los fondos comunes de inversión (FCI) que ofrecen las entidades financieras y las ALyC (Agente de Liquidación y Compensación, es una sociedad que actúa como intermediaria entre los inversores o las empresas y los mercados) son una buena opción. Existen para todos los perfiles, de alto riesgo y expectativa de buenos resultados hasta los más conservadores. La alternativa son los fondos que siguen la inflación e invierten en títulos CER, que se convierten en la opción para preservar el capital frente a la inflación, manteniendo un rendimiento superior.
Los bonos del Gobierno argentino que cotizan en dólares, como los Bonos Globales con ley extranjera o los Bonares con ley local, son todavía una excelente opción, pero de mayor riesgo. Para buscar un mejor retorno, están los FCI que invierten en empresas que cotizan en la bolsa local o en la deuda emitida por las empresas, denominada Obligaciones Negociables. O directamente elegir una cartera de acciones de empresas que cotizan en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires.
Si aún con la oferta de inversiones en activos argentinos la opción es dolarizarse, lo mejor es hacerlo también a través del sistema financiero con la compra de Cedears (Certificado de Depósito Argentino, un instrumento financiero que representa una fracción de un activo que cotiza en el extranjero y se negocian en el mercado local) que permiten invertir en acciones de empresas extranjeras.
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