La Dirección General de Aduanas (DGA) detectó "serias irregularidades" en un exportador que había presentado facturas de dudosa procedencia, para intentar vender 28 toneladas de cebollas a Brasil.
El organismo informó hoy que agentes especializados descubrieron el "ardid" durante un control realizado en Santo Tomé, provincia de Corrientes.
En un comunicado, se precisó que "el operador presentó la documentación correspondiente y, tras realizar cruces de datos, la Aduana constató una falta de trazabilidad en las operaciones del exportador, que no pudo justificar en forma convincente cómo había adquirido la cebolla en el mercado interno".
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"En ese marco, se presume que la mercadería había sido adquirida en forma irregular", consideró la DGA, que agregó que con el procedimiento se descubrió que "el exportador pretendía justificar la adquisición de mercaderías con facturas emitidas por contribuyentes sin capacidad económica ni financiera para ello" y que, además, "estaban registrados en actividades que nada tenían que ver con la producción agropecuaria".
La investigación llevada adelante por la DGA también determinó que el operador no cuenta con respaldo patrimonial, logístico, económico ni financiero para su volumen de exportaciones.
Tras el descubrimiento, el organismo que dirige Guillermo Michel no autorizó la exportación e incautó las 28 toneladas de cebollas, cuyo valor se estima en US$ 5.800.
"Esta operatoria con productos primarios es parte de un ciclo problemático que la Aduana viene detectando: simulan operaciones y utilizan intermediarios para exportar y no liquidar debidamente las divisas obtenidas", advirtió la DGA, para finalizar remarcando que "viene controlando estas maniobras para que los dólares sean debidamente ingresados al país y utilizados al servicio de la producción y empleo nacionales".
Con información de Télam
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