Giro argentino en las negociaciones Mercosur- UE: desde Paraguay, Massa pidió un nuevo tipo de acuerdo

Planteó un cambio radical en la negociación entre el Mercosur y la Unión Europea: múltiples acuerdos entre el bloque sudamericano y cada país europeo, sin que intermedie la UE.

24 de agosto, 2023 | 21.58

En su breve paso por Paraguay, el ministro de Economía, Sergio Massa, sentó una nueva postura de Argentina frente al acuerdo de libre comercio que hace años negocia el Mercosur con la Unión Europea. Después de alertar sobre constantes resistencias por parte de algunos Estados, el Gobierno está listo para avanzar pero ya no con un acuerdo entre bloques, sino con varios con los países europeos que estén dispuestos y sobre los sectores que elijan. El ministro-candidato hizo saber este cambio nada más y nada menos que tras reunirse con el flamante presidente paraguayo Santiago peña, quien viene pidiendo destrabar de alguna manera las negociaciones. 

Lo que en apariencia podría parecer un choque con la posición que asumió el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, desde su asunción a principio de año, no sería tal. El Destape pudo saber Brasil está de acuerdo con este giro.

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Durante la conferencia de prensa posterior a la reunión con Peña, el ministro-candidato mencionó que los miembros de la UE “tienen intereses divergentes” y que se debería cambiar la estrategia de negociación de los países del bloque sudamericano. “El Mercosur tiene que empezar a avanzar con los acuerdos Mercosur-países de la Unión Europea. Porque, la verdad, cuando miramos a la UE como bloque tienen intereses muy divergentes”, dijo ante la prensa argentina y paraguaya que estaba en la residencia presidencial.

El lugar que eligió para el anuncio no fue casual. Una semana antes de asumir la Presidencia, Peña ya había dejado claro que las negociaciones, tal como se habían realizado hasta ahora no estaban funcionando. “Creemos que esto se ha dilatado demasiado, considero reclamar la interrupción de las negociaciones sobre un acuerdo de libre comercio con el bloque ya que la UE no ha demostrado con sus propuestas que no tiene un interés claro de avanzar, dijo el presidente paraguayo a Reuters.

Massa fue un poco más allá esta tarde: habló de una propuesta concreta y ensayó una férrea defensa de los intereses nacionales frente a las nuevas demandas ambientales de la UE, al mencionar las posibilidades económicas que representa el desarrollo del Gasoducto Néstor Kirchner. “Los que defienden la agenda de transición energética y energía renovables sin considerar al gas como una energía de transición, nos van a pretender poner límites. Argentina va a defender el gas como energía de transición porque Argentina tiene hoy en Vaca Muerta la posibilidad de darle, no solamente a Argentina sino a Paraguay, Brasil, Uruguay y Chile energía barata por los próximo 120 años”, sentenció.

Además, puso reparos frente a la histórica postura de Francia. “Viene defendiendo los subsidios agrícolas y limitando la posibilidad de nuestro productores de ingresar a esos mercados”, cuestionó Massa. En junio pasado, Lula también había apuntado contra París como una de las fuentes de resistencia dentro de la UE. "Francia es muy dura en la defensa de sus intereses agrícolas y es importante para nosotros convencer a Francia de que es maravilloso que defiendan su agricultura, pero también se debe entender que los demás tienen derecho a defender lo suyo”.

Lula también ha sido muy duro con las nuevas condiciones ambientales que incorporó la UE al acuerdo. En una denominada Carta Adjunta, el bloque europeo presionó para que se adoptaran medidas tendientes a hacer frente a la deforestación y propuso, además, cambios en el capítulo centrado en el desarrollo y el desarrollo sostenible. Allí se reiteró la exigencia de los firmantes de “no rebajar sus normas medioambientales o laborales con la intención de atraer comercio o inversiones extranjeras”.

Los países del bloque sudamericano lo rechazaron porque consideran que podrían perjudicar la exportación de determinados productos de la región.

“No es posible que tengamos una asociación estratégica y haya una carta adicional que suponga una amenaza para un socio estratégico”, dijo Lula hace unos meses desde París. No lo consideró “justo”, especialmente porque él mismo comprometió a dar marcha atrás en las políticas de deforestación de su predecesor, Jair Bolsonaro, un giro que ya está surtiendo efectos concretos, según los últimos informes oficiales brasileños.

Si la propuesta que este jueves comunicó Massa avanza, el Mercosur podría suscribir acuerdos energéticos con Francia sin tener en cuenta los factores medioambientales. Serían por país y por rubro, con lo cual los obstáculos serían menores. Esta nueva estrategia abre un sinfín de puertas, pero aún debe ser consensuada primero dentro del Mercosur y, luego, ver cómo reaccionan los países europeos.