El Gobierno sigue impulsando el financiamiento de las importaciones para cuidar reservas

El objetivo del Gobierno, y del candidato y ministro Sergio Massa (UP), sigue siendo el cuidado de las reservas en el Banco Central, a la espera de nuevos vientos de cola provenientes del litio, Vaca Muerta y una mejor cosecha 2023-2024. Mientras tanto, desde el Banco Central se continúa con la política de impulsar a las empresas a financiar sus importaciones para evitar una mayor caída de la actividad económica. Según el último informe monetario, en septiembre se pagaron 4000 millones de dólares para importaciones cuando ingresaron bienes por un total de 6200 millones. Esto implicó un incremento de la deuda comercial; el 50% de esos pasivos corresponde a empresas de un mismo grupo. Luego de las elecciones generales, Massa amplió un beneficio exportador al conjunto de los sectores económicos y no solo a los sojeros. Este viernes, el BCRA compró 37 millones de dólares y acumulada en la semana un saldo positivo de 404 millones.

Los pagos de importaciones de bienes en septiembre totalizaron los 4006 millones de dólares, un 33% por debajo del mismo mes del año previo. “Este valor se ubicó por debajo de las importaciones de bienes FOB de septiembre, las cuales fueron de 6.212 millones, lo que podría indicar un aumento en el endeudamiento comercial o una disminución de los activos externos por anticipos efectuados previamente”, explicaron desde la autoridad monetaria.

Los dólares para las importaciones fueron uno de los temas más conflictivos para el Frente de Todos, ya sea durante la etapa de Matías Kulfas al frente del Ministerio de Desarrollo Productivo, junto a Miguel Pesce del BCRA, como en la actual etapa massista.

Para evitar la salida masiva de divisas y frenar ciertas avivadas de algunas sociedades que reclamaban dólares oficiales y sobrefacturaban importaciones (una forma más elegante de fuga de capitales), se les impuso a las empresas financiar sus compras al exterior a través de créditos comerciales o con dólares propios.

Existen empresas que basan sus negocios en las exportaciones pero a su vez demandan divisas, tal es el caso de productoras de hidrocarburos o cerealeas. Desde el Gobierno impulsan a que utilicen sus propias divisas antes que reclamarle dólares baratos al Central.

De acuerdo al informe de Deuda Externa del BCRA, la deuda comercial por importaciones totalizaba, al cierre del primer semestre, los 36.939 millones de dólares (de un total de deuda comercial por 93.000 millones). De ese total, casi el 50% corresponde a pasivos con empresas de un mismo grupo. De ahí se entiende el pedido de las autoridades nacionales para que los importadores paguen sus operaciones con dólares propios, en vez de pedírselos al BCRA.

Durante el noveno mes del año, los principales sectores demandantes de divisas fueron “Maquinarias y Equipos” y “Energía”, con compras por 287 millones y 217 millones de dólares.

¿Cómo se dice soja en brasilero?

El sector con mayor dinamismo importador durante septiembre fue “Oleaginosas y Cereales”, con un aumento del 14 por ciento interanual, mientras que, en el acumulado del año, el alza fue del 29%. Es decir que en nueve meses demandaron 4800 millones de dólares para traer porotos de Brasil.

“La sequía imposibilitó el abastecimiento de las necesidades de porotos de soja de la industria procesadora, la cual necesita de esta materia prima para mantener un nivel mínimo de operación y para cumplir con sus compromisos comerciales previamente pactados. Asimismo, la cosecha récord obtenida en Brasil tornó económicamente más conveniente la operatoria de importación, procesamiento y exportación de subproductos de soja”, explicaron desde el BCRA.

¿Pleno exportador?

Tras las primarias de agosto, el Gobierno implementó un nuevo esquema de beneficio exportador, que le permitía a las cerealeras quedarse con el 25% de sus ventas para libre disponibilidad y liquidarlas al valor implícito en las operaciones de contado con liquidación. Durante el noveno mes del año, registraron ventas por 1602 millones, un 80% menos que en septiembre del 2022, fecha en la que se había implementado el primer dólar soja.

Ahora, Massa extendió el beneficio exportador a todos los sectores, con la posibilidad de que liquiden el 30% de sus ventas a través del contado con liquidación. La estrategia del oficialismo seguirá centrada en el fortalecimiento de las divisas en el BCRA, con regulaciones que eviten la salida masiva de estos recursos pero también potenciando las exportaciones.

De todas maneras, el pleno exportador al que juega el oficialismo podría encontrar algunos amortiguadores. “La economía global ha tendido a desacelerarse en los últimos meses, con la inflación núcleo persistiendo en muchas economías avanzadas y cediendo en buena parte de las emergentes y en desarrollo. Los bancos centrales de las primeras mantienen o incluso suben las tasas de interés, mientras que los de las segundas han comenzado a reducirlas”, indicaron desde el BCRA. El diagnóstico coincide con las recientes palabras de la titular del FMI, Kristalina Georgieva.

Otra muestra la arroja el cobro por exportaciones acumulado entre enero y septiembre. No sólo ingresaron menos dólares como consecuencia de la sequía. Los cobros en el rubro alimentos cayeron un 14% en comparación con el período enero – septiembre de 2022, en la industria química se experimentó una merma del 19%, en minería otro 3%; mientras que en la industria automotriz, el saldo arrojaría un empate.

Datos que hablan. No todo puede pasar por el pleno exportador.